¿Conoces a Tus Amigos?

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"EL COCINAR DE UNA AMIGA"

Hola queridos amigos. Debido a varias circunstancias; esta semana me estuve haciendo una pregunta, que tal vez te has hecho tú mismo  ¿crees que realmente conoces a tus amigos? O en su caso,  ¿piensas que tienes amigos? Permíteme platicarte...

Hace algunos días, cuando llegué a mi casa; llegue muy triste. Mi esposo estaba ahí esperándome, lo notó inmediatamente y me preguntó el porqué. Entonces, me puse a platicarle que había estado con una persona con la cual me gustaría entablar más amistad. Alguien a quien yo consideraba podía ser mi amiga. Pero, -le dije mientras lo recordaba-; que la verdad yo veía como que ella evitaba el poder relacionarnos.
Y le decía a mi esposo, que me sentía muy triste por no tener amigos; es decir, gente que te valore, que en momentos de soledad, desee compartir contigo ¡que te estime realmente! Me refiero a esas amistades que se van formando con el pasar del tiempo. Le comenté también, que extraño a mis amigas,  ya que hace apenas unos años, nos mudamos a este país y tengo mucho sin verlas.  Le dije, que la verdad no sabía cómo hacerle; porque a veces no pasa como tú desearías y no es tan fácil volver a hacer amigos. Pero no me refiero a “amistades”. “Amistades” pueden ser cualquier persona amable que saludas en el trabajo, o en la iglesia. Me refiero a amigos, esa persona que sabes que está ahí para apoyarte en las buenas y en las malas. Que te escucha en tus tristezas, y te tiende la mano en una necesidad. Esa persona que te hace sentir acompañada.
Ese día, ahí dejamos la conversación.
Días después, mientras cenábamos juntos, le platiqué a mi esposo algo curioso que me había pasado.
Resulta, que frente a una situación que tuve, estuve platicando con mi hijo menor, tan sólo para desahogarme. Pero, para mi sorpresa; mi hijo menor al estar escuchándome hablar sobre eso y sobre cómo me había sentido yo por esa situación, no reaccionó como esperaba. Al contrario, el atentamente me escuchó y además, después me dio su punto de vista. Que a decir verdad, terminó siendo un buen consejo, como algunas otras veces me ha pasado en el pasado con él. “Un joven que da un sabio consejo a su mama”.  :)
Mientras le platicaba sobre esto a mi esposo, y el consejo que me habia dado mi hijo, ya que era algo que nos incumbía a los dos. Mi esposo se quedó mirándome en silencio y de pronto me dijo, -sabes, al contarme todo esto,  me acuerdo lo que platicábamos el otro día sobre la amistad; y me doy cuenta de algo muy importante, que ¡sí tienes amigos! Mira a tu alrededor, tienes a tus hijos, porque con todos ellos te la llevas muy bien. Me tienes a mí, que; por si no te has dado cuenta, tú y yo seguimos siendo ¡tan buenos amigos!, que casi no podemos estar el uno sin el otro. Tú y yo nos comprendemos tanto, que muchas veces sabemos lo que está sintiendo el otro, aún sin haber hablado. -paró un momento y me pregunto- ¿o acaso no.
Yo solamente asentí y seguí escuchando.
Pero lo más importante,  -continuó diciéndome-, es que tienes al Espíritu Santo, que es tu mejor amigo, como lo dice la Palabra, tú puedes tenerlo en el momento que lo necesitas. El te ama más que nadie, sabe tus alegrías y tristezas aún antes que nosotros. Verás, que en su momento, El te ayudará a reconocer y volver a formar todavía más amistades.
Me quedé pensando mientras lo escuchaba, y algo dentro de mí me dijo, sí, es muy cierto, tengo unos amigos muy valiosos en mi familia. Son un regalo para mi vida, porque ellos realmente me estiman y están ahí para mi en cualquier momento. Tienen el abrazo siempre que lo necesito, y sé que me aman.
En eso, mi esposo continuó diciéndome.
-Lo que pasa Laura, que así como tú no te dabas cuenta que sí tenías amistad; y ¡no cualquier amistad!, sino una amistad entrañable, amistad sincera, amistad profunda con tus hijos y conmigo. Así pasa a veces, que tampoco te das cuenta del compañerismo y el poder que tiene; el tener esa amistad con el Espíritu Santo. Porque El sí puede ser un verdadero consolador en momentos de tristeza, sí puede ser el mejor consejero en momentos de necesidad, El te ama enormemente. Tú sabes mi amor, -terminó diciéndome-, ¡que nosotros siempre estamos ahí para ti! Somos tu familia y te amamos.  
Me quedé pensando sobre eso y le sonreí.
Creo que es muy cierto, ¿no lo crees tú? ¡a veces pasa!, que así como no apreciamos lo que ya tenemos con los hijos, la familia, la pareja, es decir, amistad y amor verdaderos. Entonces, andamos anhelando lo que no tenemos.  Y eso, tarde que temprano, nos lleva a pensar que no tenemos suficiente, o que no tenemos lo adecuado. Y entonces pasa, que tristemente no vemos, ¡lo que realmente vale la pena! Las amistades que sí tenemos, y sobretodo, la valiosa amistad que tenemos en la familia.

Reflexionemos por un momento, ¿cuántas veces hemos hecho a un lado una amistad? porque simplemente no nos dimos cuenta o no nos interesa. De igual manera, ¿cuántas veces nos alejamos del compañerismo con el Espíritu Santo?, siendo que es la mejor opción que tenemos en nuestras vidas. Aunque nuestros ojos naturales no lo puedan ver,  ¡El está ahí siempre para ayudarnos!. Aún para encontrar y reconocer una buena amistad.
Creo que es bueno reflexionar sobre esto ¡cuán valioso es tener pocos, pero buenos amigos! Como dice el proverbio. El amigo siempre lo estima a uno; en tiempos difíciles es como un hermano.
Porque algunas veces, el lamentar lo que no tenemos, nos lleva a desatender lo que sí tenemos, una buena amistad. Una persona cercana que te estima realmente.
Si te ha pasado como a mí, que te has sentido algunas veces triste, o sólo, tal vez sin amigos. Oremos en acuerdo a nuestro Padre. Él nos ama y nos escucha siempre.

Amado Padre, me he sentido sólo y sin amigos, a veces he sentido que no le importo a mi familia. Por favor, abre mis ojos y mí corazón para saber ver y reconocer a esas personas que están en mi vida puestas por ti, que pueden ser buenos amigos,buenas influencias para mi vida,  Aquellos que me den un buen consejo en tiempos de necesidad. Me gustaría tener amigos, pocos o muchos, tú lo sabes, tal vez que los pudiera contar con mis manos. Padre bueno, ayúdame a verlos y a saber corresponder a esa amistad. Padre bueno, perdona mis faltas, te necesito, quiero conocerte más. Por favor, ven a mi corazón y  lléname con tu Santo Espíritu. Dirige mis pasos por tus caminos y ayúdame a abrir mi corazón para yo también saber ser amigo y reconocer y valorar a mis amigos.  Te lo pido en el nombre de Jesús, amen.

Lectura para Avanzar:

• Todas las citas son en (NVI) a menos que se indique lo contrario.

Proverbios 27:9.  El perfume y el incienso alegran el corazón; la dulzura de la amistad fortalece el ánimo.; los consejo del amigo alegran el alma.
Proverbios 17:17 (PDT) El amigo siempre lo estima a uno;   en tiempos difíciles es como un hermano.
Proverbios 18:24 (RVC) Hay amigos que no son amigos, y hay amigos que son más que hermanos.
Salmos 133 ¡Cuán bueno y cuán agradable es!  que los hermanos convivan en armonía!  Es como el buen aceite que, desde la cabeza,  va descendiendo por la barba,por la barba de Aarón,    hasta el borde de sus vestiduras.Es como el rocío de Hermón   que va descendiendo sobre los montes de Sión. Donde se da esta armonía,   el Señor concede bendición y vida eterna.
Eclesiastés 4:9-10.  Más valen dos que uno,  porque obtienen más fruto de su esfuerzo.  Si caen, el uno levanta al otro.   ¡Ay del que cae   y no tiene quien lo levante!
1 Juan 4:7. Queridos hermanos, amémonos los unos a los otros, porque el amor viene de Dios, y todo el que ama ha nacido de él y lo conoce.
Mateo 26:36-38. Jesús en Getsemaní.  Luego fue Jesús con sus discípulos a un lugar llamado Getsemaní, y les dijo: «Siéntense aquí mientras voy más allá a orar».  Se llevó a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo, y comenzó a sentirse triste y angustiado.  «Es tal la angustia que me invade, que me siento morir —les dijo—. Quédense aquí y manténganse despiertos conmigo».
Juan 14:26 Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, les enseñará todas las cosas y les hará recordar todo lo que les he dicho.Juan 14:16-17  Y yo le pediré al Padre, y él les dará otro Consolador para que los acompañe siempre: el Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede aceptar porque no lo ve ni lo conoce. Pero ustedes sí lo conocen, porque vive con ustedes y estará en ustedes.

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Sabes, tu oración puede cambiar la vida de una generación. Todos y cada uno de nosotros fuimos llamados por Dios para orar unos por otros, únete.
Oremos unos por otros, siempre. Este mes de MARZO seguiremos en acuerdo orando por El Presidente actual de NUESTRO PAÍS, así como cada persona en autoridad.​

Padre bueno, me uno a esta oración por el actual Presidente de MI PAÍS, así como por las personas que están en autoridad en el gobierno. Cada uno de ellos los pongo en oración delante de ti para pedirte que abras sus ojos y su entendimiento para conocerte mas, que les des un corazón que aprenda a deleitarse en tu Palabra, que tu Santo Espíritu les enseñe tu voluntad y les de Sabiduría de lo alto para gobernar con justicia y verdad. Se que eres un Dios bueno y nos amas, y sé que tu voluntad es que todos se salven  y lleguen a conocer la verdad.  Por eso te pido que abras sus ojos para verte, sus oídos para escucharte y lleguen a conocer la verdad, de que por medio de Jesús tenemos salvación.
Todo esto te lo pido en el nombre de Jesús.  Amen. 

Y Sigamos en ayuno y oración cada lunes, recuerda que el ayuno que a Dios le agrada es un corazón dispuesto a escucharlo y a dejar de momento cualquier cosa que te distraiga de tener una relación con el, tú amado.

        "PADRE, TU PALABRA ES VERDAD Y EN TI CONFIAMOS"
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Todas las citas son en (NVI) a menos que se indique lo contrario,

• Jeremías‬ ‭29:7, 11-13‬. “Además, busquen el bienestar de la ciudad adonde los he deportado, y pidan al Señor por ella, porque el bienestar de ustedes depende del bienestar de la ciudad». Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes —afirma el Señor —, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza. Entonces ustedes me invocarán, y vendrán a suplicarme, y yo los escucharé. Me buscarán y me encontrarán cuando me busquen de todo corazón.”
• 1 Timoteo 2:1-5 (DHH). Ante todo recomiendo que se hagan peticiones, oraciones, súplicas y acciones de gracias a Dios por toda la humanidad. Se debe orar por los que gobiernan y por todas las autoridades, para que podamos gozar de una vida tranquila y pacífica, con toda piedad y dignidad. Esto es bueno y agrada a Dios nuestro Salvador, pues él quiere que todos se salven y lleguen a conocer la verdad. Porque no hay más que un Dios, y un solo hombre que sea el mediador entre Dios y los hombres: Cristo Jesús.
• Proverbios 29:2. Cuando predominan los justos, la gente se alegra; cuando los malvados gobiernan, la gente sufre.
• Hechos 4:11-12. Jesucristo es “la piedra que desecharon ustedes los constructores,y que ha llegado a ser la piedra angular”. De hecho, en ningún otro hay salvación, porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres mediante el cual podamos ser salvos.​
• Salmos 119:160. La suma de Tu Palabra es VERDAD, y cada uno de tus justas ordenanzas es eterna.
• ​Colosenses 1:9-10. Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar y pedir que seáis llenos del conocimiento de su voluntad, en toda sabiduría e inteligencia espiritual, para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra y creciendo en el conocimiento de Dios. ​
• Efesios 1:16-18. ​No ceso de dar gracias por ustedes, hago memoria de ustedes en mis oraciones, para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, El Padre de gloria, les dé Espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de el, alumbrando los ojos de su entendimiento, para que sepan cual es la esperanza a la que nos ha llamado, y las riquezas de la gloria de nuestra herencia en los Santos...
• Efesios 6:18: Oren en el Espíritu en todo momento, con peticiones y ruegos. Manténganse alerta y perseveren en oración por todos los santos.
• Santiago 5:16: Por eso, confiésense unos a otros sus pecados, y oren unos por otros, para que sean sanados. La oración del justo es poderosa y eficaz.
• Mateo 26:41: Estén alerta y oren para que no caigan en tentación. El espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil.