Ven a refrescar tu matrimonio en el amor de Dios!
Disfruta del Fruto de tu Viña Algo que inevitablemente despierta la parte romántica de mí, es cuando leo sobre el amor en la pareja, un hombre y una mujer unidos por la fuerza del amor. En días pasados estaba leyendo precisamente sobre esto, en el libro de Cantares. Acompañame a leer, “Paloma mía, en las grietas de la peña, en lo secreto de la senda escarpada, déjame ver tu rostro, déjame oír tu voz; porque tu voz es dulce, y precioso tu semblante.” Que belleza de Palabra, ¿No te parece? es una escena totalmente romántica. Imagínatelo por un momento, Este suceso ocurre en una “senda secreta”, es decir, ese lugar especial para ambos, ahí el esposo se dirige a su mujer con unas dulces palabras y le dice en tono romántico, -“Paloma mía”. Enseguida le pide que lo deje ver su rostro, que lo deje escuchar su dulce voz y mirar su bello semblante. Es como si se hubieran puesto de acuerdo para encontrarse ahí, en ese lugar especial, para disfrutar plenamente un tiempo juntos. Tal parece que a los ojos del esposo, ella es en todos los sentidos muy agradable. El le está dejando saber a su amada, cuánto disfruta mirando su rostro y como se deleita con solo escuchar su voz. Ésta sola imagen me deja la idea de una pareja que se ama y disfruta realmente el pasar tiempo juntos. Hasta aquí, todo parece tan tan romántico, pero guau!!! que cambio tan drástico de tema tan sólo en el siguiente renglón, mira lo que nos dice: “Atrapen a las zorras, esas zorras pequeñas que arruinan las viñas, pues nuestras viñas están en flor.” (Cantares 2:14-15) “Atrapen a las zorras, porque quieren arruinar la viña que está en flor.” Guau!! -Tan solo unas pequeñas zorras pueden arruinar toda una viña? El que se menciona a las zorras después de la escena de amor, tiene una importante razón de ser. El primer pasaje me deja ver claramente como una pareja tuvo la intención y la ilusión de preparar un momento y un lugar para poderse disfrutar y amar plenamente. Es decir para disfrutar del fruto de su viña: el amor. Sin embargo, más adelante se nos advierte de un peligro inminente. Unas pequeñas zorras, algo que parece insignificante pero no lo es, algo que puede poco a poco pero de manera continua ir mermando el desarrollo de la vina. La vina viene siendo nuestra relación de pareja, el tiempo, amor, dedicación, y tantas cosas más que brindan verdadero gozo a la relación. Las pequeñas zorras llegan a arruinar las viñas, y no tan solo impiden dar el fruto de nuestro amor como pareja, sino que también evitan que la viña en sí florezca y disfrutemos del fruto cada dia. Se que puede haber muchas zorras, pero hoy me gustaría hablar sobre una en especial que se que afecta muchas viñas. Permíteme platicarte la parábola de una pequeña zorra llamada “La Fatiga”.. Un dia se encontraban en su “viñedo” (su hogar) el esposo y la esposa, recién casados y con toda la ilusión del mundo disfrutando el uno del otro, platicando, compartiendo juntos los alimentos, besándose y besándose hasta llegar a ...ups!... ustedes lo podrán imaginar. Su vida parecía hermosa, tenían el tiempo suficiente para todo, para comer juntos, para platicar sobre planes futuros, para salir a pasear por las sendas, hasta para mirarse a los ojos, besarse y besarse; era algo natural en ellos tener la disposición y el deseo de compartir todo. Se disfrutaban plenamente, comían del fruto de su viña cada día. Y así transcurría su vida, placenteramente, cuando un buen día sin darse cuenta, entró sigilosamente una pequeña zorra, a la cual yo llamo “La Fatiga”. Los felices esposos no se dieron apenas cuenta, porque cada uno tomo un trabajo y tenia suficientes actividades durante el dia, no les quedaba tiempo como para pararse a pensar en nada más que no fueran sus responsabilidades. “La Fatiga” se instaló cómodamente y empezó a comer del fruto que encontraba, cuando ellos se iban a dormir, ella sigilosamente entraba al cuarto, a la cocina y recorría todo con mucho cuidado de no hacer el menor ruido y se comía todo el fruto que encontraba. “La Fatiga” se sentía feliz, disfrutando de su fruto preferido sin haber tenido que cosechar. La joven pareja se habia encargado de hacerlo por ella, cosechó y cosechó ese fruto apetecible para la “fatiga” llamado Las ocupaciones, si leiste bien, La Fatiga se alimente de las ocupaciones de los demás; “Hacer, hacer y más por hacer” Curiosamente, los esposos, cada quien pensaban que estaban cuidando su viña con gran esmero, después de todo, cada uno trabajaba bastante, el apenas despertaba, se tomaba un baño rápido, tomaba su comida para llevar y se iba a trabajar, allá en el trabajo le ponía todo su empeño, para que su patrón lo viera con agrado; al final del día regresaba a casa, cansado, pero satisfecho, y llegando a casa, no se daba cuenta pero “La Fatiga” ya lo estaba esperando, para robarse el poco fruto que tuviera por compartir con su esposa. Así pasaba el sus dias, ella en cambio, después de irse su marido se ponía a hacer sus quehaceres, y más adelante se iba a ese trabajo que habían decidido tomar para “ayudar” con los gastos de la casa, para apoyar con todos esos recibos por pagar, tarjetas por cubrir, que antes no tenían, y al final del día, llegaba contenta a casa, porque habia cumplido con todas sus tareas, pero tampoco se daba cuenta, que apenas llegaba a casa, “La Fatiga” igualmente que a su esposo, le acompañaba a todas partes, robando el poco fruto que tenia para dar a su amado. Esto se convertiría en una rutina, en algo que cada vez, a pesar de dar lo mejor de sí cada uno, les estaba robando el fruto, les hacia sentir insatisfechos, a veces abrumados por las ocupaciones y ser plenamente conscientes de ello, acompañados con “La Fatiga” en sus vidas de dia y de noche. Después de todo, cada uno se preguntaba internamente,
FIN Es verdad, es una tristeza que se pierda en el matrimonio estos momentos, “Paloma mía, en las grietas de la peña, en lo secreto de la senda escarpada, déjame ver tu rostro, déjame oír tu voz; porque tu voz es dulce, y precioso tu semblante.” “Mi amado es mío, y yo soy suya; él apacienta su rebaño entre azucenas.” Estas palabras me hablan del deseo de Nuestro Dios de que en el matrimonio, esposos y esposas se deleiten el uno con el otro, tengan el tiempo suficiente para poder mirarse a los ojos y decirse como cuando eran novios: “Que dulce es tu voz y precioso tu semblante”, o “que guapo estas”, o “que bella eres”, y besarse y besarse hasta....ups! lo podrás imaginar, disfrutar plenamente del fruto de la viña. Porque sabes, finalmente hay algo que nadie puede parar, y esto es el tiempo, a todos nos llegará el día en que veremos los hijos crecer, tal vez los nietos llegar, y estaremos en compañía del esposo o esposa, y tal vez veremos atrás y diremos !cuánto nos faltó disfrutar del fruto de nuestra viña! porque todas esas ocupaciones alimentaron “La Fatiga” y tristemente pasaron los años y se lo comió todo. Sabes, Realmente no hay bien material que sustituya el gozo de estar acompañado de tu amado/a. El darse el tiempo para cuidar de tu relación es lo que finalmente dará un rico fruto, y no tan solo al final de nuestros días, sino cada dia, como fue el diseño de Dios, cada dia es el “Dia que hizo El señor para alegrarse y gozarse con mi pareja”. Desgraciadamente, a veces por dejar entrar esas pequeñas zorras al viñedo, nos encontramos sin tiempo ni energía para disfrutar unos momentos con el amado. Esto pasa cuando “La Fatiga” se vuelve parte de nuestra vida, y la aceptamos como algo normal. El cansancio de una vida rutinaria que es “trabajo-casa, casa-trabajo”, llega a comerse todo el fruto. No se cual su situación, pero te animo a que te pares a pensar,
Entonces,
Y tal vez me dirás, bueno Laura, esto suena muy lindo pero en la vida real ¿cómo le hago? Por mí trabajo y su trabajo apenas nos vemos y apenas tenemos tiempo de compartir. La verdad es que seguido me pasa que me encuentro tan fatigado/a que lo que menos quiero es compartir con calma una conversación y mucho menos tener besitos y besitos, porque “La fatiga”, el cansancio de todas las ocupaciones del día me acompañan. Te diré que lo comprendo muy bien, me he encontrado ahí, y se que así como tu situación habrá muchas otras, pero la buena noticia es que ese estilo de vida que estás viviendo hoy, no es el único camino, es cuestión de poner prioridades y orando a Dios, buscar otra manera de hacerlo; tal vez un cambio de turnos, tal vez dejar alguna actividad de lado, o hasta recortar gastos, lo importante es tener las prioridades en orden, que en este caso es darse el tiempo para cuidar y disfrutar “la viña” que tenemos con nuestra pareja. Tal vez puede parecer muy difícil hacer un cambio ahora mismo en tu vida, pero sabes, algo que grita mi corazón es: “Tenemos un Dios que hace posible lo imposible” “Un Dios maravilloso, que puede tocar corazones, puede darnos favor con el jefe, cambiar horarios, y muchas otras cosas más, lo importante es incluirlo a Él en nuestras decisiones y pedirle creyendo y recordando su grandeza y poder, y entonces lo veremos hacer maravillas. Si hoy te encuentras así, sintiendo como que un poco o tal vez mucho de robo por parte de esa zorra “La Fatiga”, y deseando disfrutar más del dulce fruto del compartir con tu pareja. Te invito a orar conmigo a Nuestro Padre, a ese Dios maravilloso que es el. "Padre bueno, gracias por ser el Dios maravilloso que eres, reconozco que te necesito para todo, necesito de tu Palabra creciendo en mí a cada momento, necesito tu amor y tu perdón, en verdad te necesito. Padre, hoy te quiero pedir que me ayudes a poner mis prioridades en orden, que podamos tener la provisión para todo en nuestra casa, pero también el tiempo para disfrutarnos como pareja, queremos disfrutar de esa viña que tu nos has dado, “el amor en nuestro hogar”. Por favor danos la sabiduría para reconocer y alejar esas “pequeñas zorras” y tomar buenas decisiones. Perdoname tambien todas mis faltas y aun las que no recuerde, y yo también perdono a todo el que me haya ofendido. Te doy gracias por haber mandado a tu hijo Jesus a morir en mí lugar, gracias, se que por ese sacrificio ahora puedo llamarte Padre, y algun dia estare contigo en el cielo. Señor Jesus, hoy abro mi corazón a ti, por favor ven a mí vida, se mi Señor y mi salvador. Todo esto te lo pido en el nombre de Jesus.' Lectura:
Nos gustaría orar por ti. Déjanos tu petición de oración.
0 Comments
Your comment will be posted after it is approved.
Leave a Reply. |
AutorCreo que no soy nada especial como para hacer grandes cosas; sin embargo, se que tengo el favor de Dios. Categorias
All
|