Ven a refrescar tu matrimonio en el amor de Dios!
Una Amiga Mía, Que me Da Sabiduría. Hola amados de Papa, permíteme platicarte sobre una amiga mía que me da sabiduría. La disciplina. Hace un par se semanas. Mi esposo y yo fuimos a una reunión de información, para que el se inscribieron a un nuevo curso (para avanzar más en la Palabra de Dios). Y estando ahí, resulta que por los horarios de su tragajo, el realmente no podía tomarlo. Cuando mi esposo se dio cuenta que no podría tomarlo, volteo conmigo sonriendo y me dijo: - ¿Acaso lo quieres tomar tu? Anda!, me insistio él, tómalo como mi regalo de cumpleaños para ti. Lo escuché, y te diré que en parte fue una sorpresa para mí. Como que no estaba planeando exactamente tomar ese paso extra, tomar el curso me agarro de sorpresa. Porque según yo, en esta etapa de mi vida, me encuentro con “muchos platos en mi mesa” (es decir, ocupada). Entre ser mamá, esposa, trabajar, escribir, etc. Sin embargo, ore y sentí que era tiempo de dar ese paso. Es un reto, sin embargo, un reto que con la ayuda de Dios por cierto lograré terminar. Pero bueno, ¿por qué te platico todo esto? Porque recordé algo que me podría ayudar a lograrlo, “Una Amiga Mía, Que Me da Sabiduría” Amado de Papá, ¿Acaso te encuentras ahora mismo ante un cambio en tu vida que te exija un reto más? ¿Tal vez tomar un estudio nuevo para avanzar? ¿O un cambio importante en tu trabajo que requiera más esfuerzo? Cuando uno se encuentra ante cambios en la vida, retos que parecen grandes, puede uno llegar a preguntarse: -“¿Lo podré hacer, lo lograré?” -“¿Será esto verdaderamente para mí?”, -“Tal vez ya paso mi tiempo, tal vez ya no estoy en edad de iniciar algo nuevo.” -“Creo que en esta etapa de mi vida, estaría mejor tomar las cosas más ligeras, es tiempo de empezar a relajarme.” Yo misma me he encontrado pensando algo de eso. Pero sabes; los pensamientos de Dios son diferentes de los nuestros. Sus planes son diferentes a lo que pensamos, sin embargo su plan, es el mejor camino para nuestra vida. Como está escrito: Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes —afirma el Señor —, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza. Jeremias 29:11 (NVI) Mientras tengamos salud y vida, tenemos oportunidad de avanzar. Un ejemplo magnífico en la biblia es el de Josué, este joven valiente que a sus 40 años tuvo el reto de entrar a la tierra prometida. Esto significaba, obedecer al plan de Dios para su vida, dejar a un lado el temor y ser valiente. A veces requirio pelear para lograrlo, esforzarse, avanzar, y tomar la tierra prometida. (Josue 1:1-9 RVR 1960). Leamos juntos: Preparativos para la conquista. Aconteció después de la muerte de Moisés siervo de Jehová, que Jehová habló a Josué hijo de Nun, servidor de Moisés, diciendo: Mi siervo Moisés ha muerto; ahora, pues, levántate y pasa este Jordán, tú y todo este pueblo, a la tierra que yo les doy a los hijos de Israel. Yo os he entregado, como lo había dicho a Moisés, todo lugar que pisare la planta de vuestro pie. Desde el desierto y el Líbano hasta el gran río Eufrates, toda la tierra de los heteos hasta el gran mar donde se pone el sol, será vuestro territorio. Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé. Esfuérzate y sé valiente; porque tú repartirás a este pueblo por heredad la tierra de la cual juré a sus padres que la daría a ellos. Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas. Y tal vez pensarás, bueno, bueno, despues de todo, Josué solamente tenía 40 años cuando entró a la tierra prometida, yo ya tengo... tantos años, ya estoy grande como para empezar algo. Oh, soy demasiado joven para emprender un cambio asi. Pero sabes, no es así, Dios nos enseña que mientras tengamos salud y vida, tenemos oportunidad de seguir avanzando. La misma historia de Josué nos lo muestra. Es algo de lo que más me gusta en esta historia: que a los 85 Josué se encontro diciendo: Y ahora, he aquí, el SEÑOR me ha permitido vivir, tal como prometió, estos cuarenta y cinco años, desde el día en que el SEÑOR habló estas palabras a Moisés, cuando Israel caminaba en el desierto; y he aquí, ahora tengo ochenta y cinco años. Todavía estoy tan fuerte como el día en que Moisés me envió; como era entonces mi fuerza, así es ahora mi fuerza para la guerra, y para salir y para entrar. Ahora pues, dame esta región montañosa de la cual el SEÑOR habló aquel día, porque tú oíste aquel día que allí había anaceos con grandes ciudades fortificadas; tal vez el SEÑOR esté conmigo y los expulsaré como el SEÑOR ha dicho.…Josué 14:11 (NVI). Leyendo esto, podemos notar, que al entrar a la tierra prometida Josué tenia tenia 85-45= 40 años. Y más adelante, cuando habla de las ciudades fortificadas, tenia ya 85 años. Es cuando comenta que Dios lo habia mantenido hasta ese día con fuerza y vigor a pesar de su edad avanzada. Para Josué su edad no era una limitación, porque leemos que el seguía confiando en que Dios le daría otra victoria más. Que magnifica historia, ¿no crees? Aquí vemos como seguir los planes de Dios para nuestra vida, no se tienen que parar por la edad, o condiciones físicas. Porque El sabe a donde y como nos lleva a seguir avanzando. Creo que hay etapas de nuestra vida en que Dios nos quiere llevar a más; pero nuestros pensamientos, la manera de ver las cosas, la falta de decisión por temor o las ocupaciones que ya tenemos; nos hacen dudar si lo podremos hacer o no. Por eso, me gustaría hablarte sobre “Una amiga mia, que me da sabiduria.” La disciplina. Cuando deseamos lograr algo más en nuestra vida, hay veces que realmente no queremos hacerlo, porque nuestra propia humanidad no desea esforzarse más. ¿Te ha pasado? Algo ocurre cuando tratamos de hacer algo nuevo. Para nuestra carne es difícil cumplir algo que nos imponemos. Es como decir que la ley produce rebeldía. Cuando Jesus hablaba de cumplir la ley, decía que solamente con Dios podríamos lograrlo: (Lucas 18:27) Para el hombre es imposible, (lograr su salvación solo) pero para Dios todo es posible. Con Dios si podemos., aunque sea un reto grande para nosotros. Esto me enseña que para poder hacer algo difícil para nosotros, es posible hacerlo con El. Conocemos la Palabra en Filipenses 4:13: todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Esta Palabra me da ánimos y confianza de que EN EL, si puedo cambiar un mal hábito o una manera de ser en mi vida, que me estorbe para avanzar y ser mejor en mi caminar con Dios. Tal ves, tu como yo, piensas que ya tienes “muchas cosas en tu mesa” (muchas ocupaciones, tal vez no es la edad adecuada, o no sientes la energía, o no tienes el tiempo, recursos, etc) Y por lo mismo, el tomar un reto más, nos parece difícil. Pero el Señor nos dice “Todo lo puedo EN EL, dentro de Él , con su ayuda, Podemos conocer mejor a mí amiga que da sabiduría, la disciplina. Es decir, aprender a ser disciplinados, organizando mejor nuestro tiempo y actividades; para lograr hacer el cambio que queremos. Podemos cambiar un mal hábito cada día por uno bueno. ¿Qué aprendemos de la historia de Josué? Creo que hay demasiado por aprender. Sin embargo, hablando sobre el tema, ¿Cómo puedo tomar un nuevo reto, un curso nuevo, un cambio en mí trabajo, un avance en la empresa, o cualquier cambio que ahora mismo me está pareciendo demasiado grande? Me gustaría resumirlo en 3 puntos que aprendí: DISPOSICION, INSTRUCCION Y DESICION:
Oración del mes de DICIEMBRE: Para que Dios nos lleve a cumplir Su plan en nuestras vidas, pasando los retos que se nos presenten, así como a nuestros hijos. Vamos a unirnos este mes para creerle y pedirle a Nuestro Padre, ese maravilloso Dios que hace posible lo que parece imposible. Vamos a unirnos y levantar nuestra oración como Su iglesia, como sus hijos, como su ejército: Padre bueno, hoy pongo delante de ti mis caminos, para que tu endereces mis veredas. Te pido que nos des la sabiduría para tomar decisiones y abrazar cada cambio en mí vida, por muy grande que me parezca. Te pido que me des de tu gracia, así mismo la fuerza, y cada don necesario para que tu voluntad sea hecha en mí vida, así como en la de nuestros hijos. Gracias por mandar a tu hijo Jesucristo a morir en mí lugar. Lo reconozco como mi salvador. Ven a mí vida Señor, lléname con tu Santo Espíritu. Ayudamos para lograr pasar cada reto y cumplir cada meta que sea conforme a tu voluntad. Padre, tú eres bueno y te complaces en bendecirnos. Como lo dice en tu Palabra. Gracias por tu amor y tu bondad. Te amamos. Todo esto te lo pido en el nombre de Jesus. Amen. "PADRE, TU PALABRA ES VERDAD Y EN TI CONFIAMOS"
Lectura: (Todos los versículos son en NVI, a menos que se mencione lo contrario)
Nos gustaría orar por ti. Déjanos tu petición de oración.
0 Comments
Your comment will be posted after it is approved.
Leave a Reply. |
AutorCreo que no soy nada especial como para hacer grandes cosas; sin embargo, se que tengo el favor de Dios. Categorias
All
|