Ven a refrescar tu matrimonio en el amor de Dios!
La semana pasada me encontraba tomando un café con alguien a quien estimo mucho. Mientras tomamos nuestro rico café le pregunté
Fin de la anécdota. Dios desea prosperarme? Como saber si Dios me está escuchando? O mejor aún, como puedo ver la respuesta a mis oraciones? Creo que estas son preguntas muy válidas y probablemente más de alguno de nosotros lo hemos llegado a pensar. La verdad es que, aunque las circunstancias nos digan lo contrario, Dios nos ama, nos escucha y si desea que prosperemos , como nos lo dice esta cita (3 Juan 1:2) Amado, Si me preguntaras, Laura, -Qué puedo hacer diferente para ver que mis oraciones sean respondidas? yo te diría 3 sencillos Tips.
Dice la Palabra que sin fe es imposible agradar a Dios, porque es necesario que el que se acerca crea en El. (Hebreos 11:6) Creer en Dios suena muy sencilla, quizás me dirás, Laura, por supuesto que creo en Dios, pero creer en Dios va más allá de solamente tener el conocimiento de que Dios existe. Creer en Dios, es recordar y reconocer desde el fondo de tu corazón que realmente puedes poner en El toda tu confianza. Que a pesar de las circunstancias le puedes decir a tu alma lo que Jesús dijo, “No temas, cree solamente.” (Marcos 5:36 RVR1960). Por lo tanto, cuando nos acercamos a orar a Dios, tenemos que recordar cuan grande es El, tenemos que recordar y meditar en sus maravillas. El es tan Grande y poderoso que sostiene el universo con el poder de su Palabra. El sabe todas las cosas; el pasado el presente y el porvenir de nuestra vida, aún el número de nuestros cabellos los tiene contados. “Pues aun vuestros cabellos están todos contados.” (Mateo 10:30 RVR1960). Tenemos que seguir creciendo nuestra fe y confianza en Dios, leyendo la Palabra todos los días y meditando en ella, porque como está escrito, la fe viene por el oír y el oír la palabra de Dios; no hay otra manera de que tu fe crezca, sino tan sólo leyendo y meditando en la Palabra de Dios, Para que así, aunque tus ojos vean que la situación no cambia, tu corazón pueda decir confiadamente, Creo en Ti Señor, no temo 2. RECUERDA EL AMOR QUE DIOS TIENE POR TI. A veces nos olvidamos de algo tan sencillo, Dios me ama. A veces nuestros pensamientos están tan centrados en lo que nuestros ojos ven, que nos olvidamos que existe un Dios que nos creó y nos ama grandemente. Su deseo es bendecirnos!!! De eso no hay la menor duda, de hecho El ya nos bendijo. Como está escrito en el salmo 21:6 “Porque lo has bendecido para siempre; Lo llenaste de alegría con tu presencia.” Alégrense porque Dios nos ha bendecido y nos ha bendecido abundantemente. Como un buen padre El desea lo mejor para sus hijos. Su amor por nosotros y el deseo de bendecirnos no depende de las circunstancias, sino del gran amor que ya nos mostró al mandar a su hijo a morir por ti y por mi. Cuando Jesús murió en la cruz, su sacrificio nos dio el lugar de hijos ante Dios y herederos de todas sus promesas. Por eso al orar tenemos que meditar en su gran amor para poder creer que El realmente quiere lo mejor para nosotros; para que entonces no seamos como el hombre de doble ánimo, creyendo un minuto que Dios está contigo y al siguiente minuto que quizás ya te dejo. (Santiago 1:8) Por qué la duda es el peor enemigo de tus oraciones. Cuando ores dile a tu alma la verdad, Dios Me Ama 3. PIDE CONFORME A SU VOLUNTAD. Dice la palabra que no sabemos pedir como conviene y muchas veces así sucede. “Así mismo, en nuestra debilidad el Espíritu acude a ayudarnos. No sabemos qué pedir, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras.” (Romanos 8:26 NVI) Tenemos que recordar que el Espíritu de Dios habita en nosotros y él es quien nos puede guiar para orar lo que nos conviene. Si tienes el don de orar en lenguas, hazlo; de cualquier manera pide al Espíritu Santo que te guíe en tu oración y entonces busca en la Palabra de Dios la promesa específica para tu situación. Recuerda, al acercarte a El para orar,
Es decir, cuando empieces a orar, pídele al Espíritu Santo que te guíe para encontrar cuál es una promesa para tu vida. Al hacerlo, El te llevará a encontrar la promesa que Dios tiene para ti, y ésta será un rema en tu corazón, será algo tan vivo y verdadero que podrás usarlo al orar. Es decir, quizás no sea lo más conveniente que ores como mi amigo pidió esa mañana, “Señor, tú sabes que yo estoy en el área de ventas, hoy te quiero pedir vender esta cantidad específica de artículos para lograr mis metas” Sino que más bien, cuando pidas ayuda al Espíritu Santo, El te va a dirigir a darle gracias a Dios porque como dice su promesa, el bendice la obra de tus manos. (Deuteronomio 28:12) Permíteme explicarme con una experiencia que tuve hace algunos años, (puedes leer toda la historia en mi libro, "3 Importantes Tips para un Matrimonio Feliz", Amazon) Hace cerca de 30 años, cuando mi esposo todavía no le entregaba su vida al Señor, teníamos muchos problemas en nuestra relación. Yo me sentía tan triste que estaba considerando seriamente el divorcio. Un día recuerdo que fui a mi recámara, me senté en mi sillón preferido y empecé a orar a Dios mientras leía en su Palabra, le pedí al Espíritu Santo que me hablara, recuerdo que en medio de mi angustia le dije algo así, “Señor tú sabes todas las cosas, sabes por todo lo que estoy pasando y sabes que estoy realmente considerando divorciarme aunque no es mi deseo. Espíritu Santo, siento que no se que pedir o como hacerlo, por favor te pido que me lleves a orar como más conviene para mí situación, ayúdame a encontrar en tu Palabra la promesa para mí. En verdad te necesito!” Cuando terminé de orar, continué leyendo la Palabra y entonces él me llevó precisamente a leer una cita bíblica que se encuentra en Filipenses 2:9-11 (NVI) habla sobre Jesus, dice asi, "Por eso Dios lo exaltó hasta lo sumo y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre, para que ante el nombre de Jesús se doble toda rodilla en el cielo y en la tierra y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre" Guau, mientras leía esta Palabra, algo empezó a hablar fuertemente a mí corazón, era como si estuviera llegando a lo profundo de mí alma, aunque quizás ya lo habia escuchado antes, ahora sonaba tan real y verdadero! que hizo rema en mí, es decir, esta precisa Palabra tomo vida en mi interior y en ese momento comprendí que toda rodilla, es decir, toda rodilla, incluyendo a mi esposo y a toda persona, en algún momento va a doblar rodilla ante Jesus y lo va a reconocer como su Señor. Entonces empecé a orar con esta Palabra por mi esposo. Dentro de mí oración, empecé a decirle a Dios cada día, “...Señor creo en ti y creo en tu Palabra, hoy te doy gracias porque mi esposo ya dobló rodilla ante ti y te conoce como su Señor y salvador.... Al día siguiente de que ore, no vi ningún cambio; sin embargo, seguí creyendo que mis ojos lo verían. A la semana siguiente seguí orando, y aunque de nuevo no vi ningún cambio en mi esposo, seguí creyendo. Al mes siguiente lo mismo, no vi que mi esposo cambiara o mi relacion mejorara, sin embargo seguí creyendo. Así pasaron los meses, mi relación empeoraba y mi esposo seguía igual o peor conmigo, pero yo seguía creyendo en que Dios cumple sus promesas. Como la historia de Abraham. (Romanos 4:18) Abraham creyó que tendría un hijo, siendo el y su esposa ya muy avanzados de edad. Abraham creyó en esperanza contra esperanza ya que su promesa era naturalmente sin esperanza, aparentemente imposible, por lo que tenia que intervenir el poder de Dios para lograrlo. Al igual que Abraham, yo seguí creyendo aunque mis circunstancias me decían que nada diferente había pasado. Yo seguí orando con esa Palabra y creyendo lo que todavía no se veía en lo natural, como si ya lo viera. Continue hablando las cosas que no se ven, como si ya fueran. Ya que la palabra de Dios es viva y eficaz y yo confie que esa Palabra estaba haciendo para lo que fue hecha, estaba yendo al espíritu de mi esposo y discerniendo los pensamientos y las intenciones de su corazón. Aunque yo no lo veía en lo natural, la Palabra de Dios lo estaba transformando de tal modo, que al paso de un año, la poderosa Palabra de Dios hizo para lo que fue hecha en su totalidad y yo vi como mi esposo por fin dobló rodilla ante en Señor. Si, lo que era imposible, fue posible con el poder de Dios. Ahora el es un hombre nuevo, transformado por el poder y el amor de Dios. Gracias a que el Espíritu Santo me reveló esa promesa, ahora, llevamos más de 25 años sirviendo al Señor y llevando las buenas nuevas a los matrimonios. Con Dios de tu lado, si se puede! Amado, no se que circunstancia estes pasando, pero te animo a que busques un tiempo a solas en tu recámara con el Señor y que ores a El. Dios te ama! El está interesado en ayudarte, solo abre tu corazón y dile, "Padre bueno, te necesito, te abro mi corazón, y te reconozco como mi Señor y salvador, ayudame por favor en esta situación, revélame en tu Palabra tus promesas para mí vida. Me rindo a ti, haz en mí tu voluntad, te amo. Gracias. Te lo pido en el nombre de Jesus, amen." Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey. Nos gustaría orar por ti. Déjanos tu petición de oración.
1 Comment
Nancys Rojas
4/1/2021 09:10:34 am
Muy complacida con su palabra y la enseñanza por favor oracion para aumentar MI FE Y CREER Y DEPENDER SOLO DE MI SEÑOR JESUCRISTO AMEN gracias.
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AutorCreo que no soy nada especial como para hacer grandes cosas; sin embargo, se que tengo el favor de Dios. Categorias
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