Ven a refrescar tu matrimonio en el amor de Dios!
Una tarde salí a comprar el mandato de la semana. Mientras estaba comprando la comida, sentí que tenía que caminar por un pasillo en especial. Decidida me dirigí a ese pasillo y mientras caminaba en el, tenía la sensación de que tenía que encontrar algo, no sabia bien de que se trataba, solamente era una sensación de que algo me faltaba. Te ha pasado? Como no sabia lo que era, empecé a ver lo que estaba en ese pasillo, entonces mi mirada se detuvo frente a una harina para waffles que acababa de comprar la semana pasada. Resulta que la semana pasada vinieron de visita mis hijos, y ellos me comentaron algo así, “vamos a comprar esta harina para waffles es muy rica” recuerdo que en esa semana la compramos y preparamos cada mañana esos deliciosos waffles. Volviendo al día en que estaba en el supermercado, mientras me encontraba parada frente a la harina para Waffles, sentí que tenía que comprarla; sin embargo, me vino el pensamiento “para que voy a comprar ahorita esta harina, si realmente no sé cuándo van a venir otra vez de visita mi familia”. Me pareció muy lógico lo que pensé, y decidida empecé a caminar hacia las cajas. Mientras caminaba hacia allá, volví a sentir que tenía que volver a ese pasillo, entonces me dirigí de nuevo hacia donde estaba la harina. Mientras iba para allá, algo me decía que la comprara. Llegué de nuevo frente a la harina para waffles, y en eso noté que tenían un letrero de que estaba en descuento. Entonces volví a pensar “para que la voy a comprar ahorita, no creo que sea una buena decisión, porque ni siquiera se cuando van a volver a venir mis visitas”. Entonces, tan solo me fijé cuando terminaba la oferta y como era aproximadamente en un mes, decidí hacer caso a mis pensamientos y no la compre. Recuerdo que me dirigí a la caja, pagué y cuando llegué a mi casa esa situación quedó olvidada. Les cuento que no habían pasado ni siquiera tres días cuando vinieron a visitarme mi familia de nuevo y al llegar a casa, -adivinen que fue lo primero que me pidieron? pues sí, adivinaste bien, me pidieron que si les preparaba esos deliciosos waffles. En el momento que me dijeron eso, me acordé de que varias veces había sentido comprarlos mientras estuve en el supermercado y sin embargo no lo había hecho. En ese momento pensé, “quizás fue el Espíritu Santo quien me hacía sentir que debía comprarlos, porque él sabe todas las cosas” Me arrepentí de no haberlo hecho, pero trate de verle el lado bueno y pensé , “voy a regresar porque creo que la oferta no ha pasado aun”. Me dirigí hacia el super y cuál fue mi sorpresa de que llegando ahí la oferta seguía, sin embargo los waffles que yo quería, guau!!! ya se habían terminado! Me quedé pensando de nuevo, como no había hecho caso ese día de lo que sentía en mi interior y los había comprado mientras todavía había en stock. Empecé a buscar alguna otra opción para comprar, ya que mi familia estaba esperando en casa por el desayuno. Cuando de repente en mi interior escuché la voz del Espíritu Santo que me decía claramente “No dejes pasar las oportunidades” y me empezó a ministrar respecto a esto. Creo que a veces así nos pasa en la vida, frente a nosotros se nos presenta una clara oportunidad y la dejamos pasar por no decidirnos a tomarla. Pensamos que nuestra lógica es mejor, o algunas veces no identificamos que esa suave voz en el interior es el Espíritu Santo que nos está hablando. Esta enseñanza vino a hablar claramente a mi corazón, porque era un tiempo en el que mi familia y yo teníamos que tomar decisiones respecto a una oportunidad que se nos estaba presentando. Recuerdo que esa tarde mi esposo llegó del trabajo y le platiqué lo que había pasado, y como fue que supe que el Espíritu Santo me estaba diciendo no dejes pasar las oportunidades que se te presentan. Curiosamente, mi marido me dijo que el había estado sintiendo eso mismo. El me dijo, “sabes Laura, mientras iba manejando al trabajo, yo estaba pensando en que no teníamos que dejar pasar las oportunidades, en que quizá esto que estábamos viviendo era una oportunidad que Dios nos estaba presentando”. Yo sentí muy claro en mí corazón que “las oportunidades vienen, que no las dejemos pasar” confirmando con esto, que no dejásemos pasar las oportunidades, y que pusiéramos manos a la obra. Los dos estuvimos de acuerdo en que Dios nos estaba hablando, El nos estaba dirigiendo en nuestro corazón y teníamos que estar atentos para escuchar Su voz y tomar decisiones en el momento oportuno. Ya que esta es una temporada en que tenemos que tomar decisiones importantes para toda mi familia, después de esta situación, mi esposo y yo nos pusimos de acuerdo para ayunar de nuevo, orar al respecto y pedirle al Señor que nos dirija en cada decisión. En nuestra vida como hijos de Dios, tenemos que estar apercibidos que El nos habla al corazón, en lo íntimo de nuestro ser. Creo que ninguno de nosotros deseamos dejar pasar las oportunidades que vengan de parte de Dios, cierto? Dios es Espíritu, y el nos habla al interior, no con los pensamientos de la mente, sino con suaves pensamientos al corazón. Como está escrito, “El pone el querer como el hacer por su buena voluntad” Tenemos que estar atentos para escuchar su voz y no ser confundidos. Manteniendo una relación continua con el Señor, un platicar con El día y noche, un buscarlo en la Palabra. Dios nos habla al corazón. pero además, El mismo nos dirige a donde están las oportunidades. Solamente tenemos que aprender a verlas. Saber ver las oportunidades, es abrir los ojos del corazón para tener fe en que algo bueno puede pasar en tu vida, saber ver las oportunidades es decirle Señor, heme aquí! quiero seguir lo que Tú tienes planeado para mí. A veces sera algo que parece tan riesgoso que pensamientos extraños te pondrán a dudar. Para cada persona es diferente la oportunidad que se le presente, para ti sera abrir un nuevo negocio; o quizás creer en esa idea que has tenido por tanto tiempo y atreverte a desarrollarla; o algo tan sencillo pero a la ves hermoso como decidir abrir tu corazón para esa nueva relación que te está esperando. Abrir los ojos a las oportunidades, es atreverte a creer que Dios tiene buenas cosas para ti, es ver como posible y cierto que las grandes bendiciones vienen en camino, porque los planes de Dios son buenos, son planes de paz y de bondad para con nosotros, sus hijos. El ya nos bendijo con toda bendición, solo tenemos que atrevernos a caminar en fe. Como hijos de Dios, tenemos que practicar el caminar en fe. Caminar en fe es como la escalera eléctrica de la portada, cuando tú te subes, solamente mantendrás tu mirada hacia arriba esperando llegar al final de tu camino. De igual manera, cuando caminamos en fe, es como subirte ahí, dejándote llevar por la dulce guianza del Espíritu en tu corazón, viendo al autor y consumador de la fe llevarte frente a las oportunidades. Mientras así lo hagas, al igual que las escaleras electricas tu camino va a fluir, y vas a llegar al destino planeado por Dios. Cómo está escrito, Y todo lo que te venga a la mano, hazlo con todo empeño;...(Ecl 9:10) A veces por estar pensando y pensando, se te pueden pasar las oportunidades, ya que hay oportunidades que se te presentan una sola vez en la vida y en el momento preciso, oportunidades que Dios pone delante de ti para que las tomes. Cuando te encuentres frente a ellas, sobrepasa el temor, decídete a tomar el riesgo y actúa caminando en fe. Jorge y yo habíamos estado orando por una oportunidad como esta y llegó en el momento preciso. Ahora dimos el primer paso y estamos decididos a seguir caminando en fe. Puede ser que tú al igual que nosotros hayas estado orando por una oportunidad, por un trabajo en específico, por esa relación especial. Dios está escuchando tus oraciones, hoy yo te quiero animar a que abras tus ojos de la fe para ver las oportunidades y estés atento con tus oídos espirituales para escuchar la voz del Espíritu Santo dirigirte a las bendiciones que vienen por delante, porque sabes, Dios tiene grandes bendiciones para cada uno de nosotros. Oremos juntos, “Padre Bueno, te damos gracias por este día. Señor, hoy te quiero pedir que abras mis oídos para escuchar tu voz, como la oveja al pastor y mis ojos para saber ver claramente las grandes oportunidades que Tú tienes para mí y mí familia. No permitas que nos desviemos ni a la izquierda ni a a la derecha, por favor afirma nuestros pasos en tus caminos y enséñanos a mirar con los ojos de la fe las oportunidades que tienes para nuestra vida. Te lo pedimos en el nombre de Jesús, amén”. Lectura Para Avanzar:Todas las citas son en NVI a menos que se indique lo contrario
ORACIÓN PARA QUE DIOS PROTEJA Y GUÍE A NUESTROS HIJOS Vamos a unirnos en oración como su iglesia, como sus hijos, como su ejército.
"Padre bueno, me uno a cada persona que está levantando esta oración a ti, ponemos delante de ti la vida de mi hijo/a _______ y _________ (nombra cada uno de los que quieras poner en oración). Padre bueno, gracias por este día. Perdona mis ofensas y límpiame con tu sangre de toda maldad. Señor, tú lo conoces mejor que yo porque tú lo creaste desde el vientre. Padre bueno, hoy te quiero pedir que vuelvas su corazón a mi como su madre/padre y a ti como su Dios. Te pido que donde quiera que el ande, tu Santo Espíritu lo guíe en todo momento. Te pido que lo llenes más para que no sea confundido ni avergonzado. Te pido que pastores su alma para que en todo tiempo él pueda escuchar tu voz claramente como oveja al pastor. Te pido que tus ángeles acampen alrededor de él y lo guarden del mundo. También oro para que lo protejas y le des el discernimiento para no caer en tentación ni en las trampas del maligno. Padre bueno, tú sabes tu plan para su vida, y se que es el mejor; hoy te pido que se haga tu voluntad en su vida. Oro a ti para que llenes su corazón con tu paz* que sobrepasa todo entendimiento y pongas en él la confianza de saber que tú estás con él a cada paso que da. Te pido que le hables a su corazón, y lo enseñes en tus caminos, para que grande sea su bienestar. *Te pido que lo unjas y le des la sabiduría *para andar en el mundo y aún así poder hacer tu voluntad. Gracias Padre, por la obra* que haces en el cada día, porque él es un hombre que te ama y te sigue todos los días de su vida. Gracias por amarnos tanto Padre. Todo esto te lo pido en el nombre de Jesús. Amen." "PADRE, TU PALABRA ES VERDAD Y EN TI CONFIAMOS" LECTURA: (Todas las citas bíblicas son en (DHH), a menos que se mencione lo contrario) Filipenses 1:6 Estoy seguro de que Dios, que comenzó a hacer su buena obra en ustedes, la irá llevando a buen fin hasta el día en que Jesucristo regrese. Isaías 54:13. Yo instruiré a todos tus hijos; todos ellos tendrán gran bienestar. Santiago 1:5 Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará; pues Dios da a todos sin limitación y sin hacer reproche alguno. Juan 10:27 Mis ovejas reconocen mi voz, y yo las conozco y ellas me siguen. Filipenses 4:7 Así Dios les dará su paz, que es más grande de lo que el hombre puede entender; y esta paz cuidará sus corazones y sus pensamientos por medio de Cristo Jesús. 1 Juan 1:7 Pero si vivimos en la luz, así como Dios está en la luz, entonces hay unión entre nosotros, y la sangre de su Hijo Jesús nos limpia de todo pecado. Salmos 139:13 Tú fuiste quien formó todo mi cuerpo; tú me formaste en el vientre de mi madre. Juan 16:13 Cuando venga el Espíritu de la verdad, él los guiará a toda verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que dirá todo lo que oiga, y les hará saber las cosas que van a suceder. Salmos 25:3 ¡Que no sea jamás avergonzado, ni confundido ninguno de los que en ti confían! ¡Que sean puestos en vergüenza, los que sin motivo se rebelan contra ti! Isaías 58:11 Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan. Salmos 91:11 pues él mandará que sus ángeles te cuiden por dondequiera que vayas. Juan 17:15 No te pido que los saques del mundo, sino que los protejas del mal. Filipenses 1:9-10 Pido en mi oración que su amor siga creciendo más y más todavía, y que Dios les dé sabiduría, entendimiento, y discernimiento. para que sepan escoger siempre lo mejor. Así podrán vivir una vida limpia, y avanzar sin tropiezos hasta el día en que Cristo vuelva. Jeremías 29:11 Yo sé los planes que tengo para ustedes, planes para su bienestar y no para su mal, a fin de darles un futuro lleno de esperanza. Yo, el Señor, lo afirmo. Romanos 12:2 No vivan ya según los criterios del tiempo presente; al contrario, cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de Dios, es decir, lo que es bueno, lo que le es grato, lo que es perfecto. Nos gustaría orar por ti. Déjanos tu petición de oración.
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AutorCreo que no soy nada especial como para hacer grandes cosas; sin embargo, se que tengo el favor de Dios. Categorias
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