Ven a refrescar tu matrimonio en el amor de Dios!
¿Porqué todo me sale mal? ¿Por qué llevo tanto tiempo trabajando, esforzándome, tratando de hacer las cosas bien y sin embargo de continuo nada me sale bien? ¿Te has encontrado en esta situación? Ese momento en donde estás desesperado porque a pesar de todos tus esfuerzos parece que nada da resultado Hace un par de décadas mi esposo y yo nos encontramos en una situación similar, año tras año, a pesar de todos nuestros esfuerzos las cosas iban de mal en peor. Permíteme platicarte sobre esto, compartiendo contigo un extracto de mi primer libro llamado «3 Importantes Tips Para un Matrimonio Feliz». Extracto del libro: …Aún recuerdo ese día como si fuera ayer, se acercaba el fin de semana, era un jueves por la tarde cuando llegamos al edificio y subimos al último piso para iniciar nuestro día de trabajo. Cuando entrabas a las oficinas se podía ver el balcón a través de los ventanales, y más allá en el horizonte, los clásicos y antiguos edificios de la ciudad parecían enmarcados en un nostálgico atardecer nublado. Jorge se fue directo a su lugar y yo al mío. Me senté y desde ahí lo busqué con la mirada, lo vi en su escritorio a través del cristal que nos dividía; estaba sentado con la cabeza baja, se le veía tanto pesar en su rostro que yo podía casi sentir lo que su corazón estaba pasando. Todo él reflejaba sólo angustia y tristeza. Orando al Señor Jorge le dijo, mientras lo escribía en un cuaderno: "Padre, ya me cansé de tratar de salvar el negocio. Siento que he hecho todo lo que pude y no veo que mejore. No sé qué pasará. Por favor ayúdame y guíame para tomar las mejores decisiones. Me rindo a ti. Te pido que se haga tu voluntad y no la mía”. Ese día fue un descanso para él, me dijo que sintió como si le hubieran quitado un gran peso de encima. Ahora comprendo que se lo estaba dando al Señor, Jorge estaba poniendo toda su confianza y su vida completamente en Él. Puedes leer el resto de la historia en el libro «3 Importantes Tips Para un Matrimonio Feliz». Por aquellos días, en uno de los momentos más difíciles que pasamos, fui a buscar al Señor y llorando le abrí mí corazón. Me sentía sobremanera triste, desanimada y confundida. No comprendía porque a pesar de todo el trabajo, esfuerzo y tiempo invertidos, estábamos apunto de perderlo todo. No me explicaba porque las cosas no salían bien. Llevaba meses y meses que todo lo que hacíamos para que nuestro negocio se sostuviera y nuestra familia saliera adelante no funcionaba. Recuerdo que en medio de mi oración le pregunté al Señor por que estaba pasando todo esto, y Dios en su inmensa misericordia me respondió a través de un sueño. En el sueño mi esposo se encontraba dentro de un edificio vacío, él caminaba de un lado para otro pensativo mientras paseaba empujando a un señor en una silla de ruedas. En el sueño yo sabía que el hombre sentado en la silla de ruedas podía caminar, sin embargo Jorge ni siquiera lo volteaba a ver, Jorge solamente estaba cabizbajo, pensativo, caminando de un lado a otro jalando al señor en la silla de ruedas con la esperanza de que pudiera caminar. En el mismo sueño le pregunté al Señor - ¿Qué me quieres decir Padre bueno? y Él me respondió, - el señor en la silla de ruedas representa a tu negocio, Jorge se la ha pasado año tras año trabajando, esforzado, enfocado en salir adelante, tratando de poner sus ideas en marcha, empujando y empujando sin darse cuenta que este negocio sí puede caminar Y yo le preguntaba, - Señor pero ¿por qué no camina este señor si realmente si puede caminar? Y el señor me respondió, - Recuerda que el señor en la silla de ruedas representa tu negocio, no ha podido caminar por sí solo porque Jorge no me ha pedido ayuda, él ha estado haciendo las cosas todo el tiempo a su manera sin escuchar de mi sabiduría. Cuándo desperté lo platiqué con Jorge y entonces es cuando pasó realmente la escena que acabas de leer en el libro. Jorge por fin le cedió el negocio a Dios y fue cuando le pidió que se hiciera su voluntad. Esta historia no se resolvió en un día, fue un caminar de la mano con Dios aprendiendo cada día a tomar decisiones basadas en su sabiduría, reconociendo que necesitamos cada día buscarlo primero a El. Si alguna vez te has encontrado en una situación similar podrás comprenderlo. Cuando uno está desesperado y desea salir adelante muchas veces toma decisiones sin pensar o consultar a Dios, decisiones que en el momento parecen muy buenas, pero que a veces no son las mejores. Para cada situación en la vida tenemos dos caminos, hacer las cosas a nuestro modo o hacerlas a la manera de Dios. Por experiencia propia aprendimos que hacer las cosas a nuestro modo, puede parecer muy bueno y hasta muy inteligente porque después de todo estamos haciendo las cosas con toda la mejor intención, sin embargo, a veces no es lo más sabio. Por eso es que el señor nos dice que reconozcamos nuestra necesidad de Él y Él enderezará nuestros caminos. Si le buscamos, Dios promete dirigirnos. Como nos dice en Prov. 3:6 RVR1960.
La verdad es que vivimos en un mundo material que se manifiesta físicamente, pero detrás de él hay un mundo espiritual que nuestros ojos naturales no pueden ver, agrega a eso que nuestras capacidades y habilidades son limitadas, por lo tanto podemos comprender que necesitamos a Dios, quien todo lo sabe y todo lo ve, además es inmensamente poderoso y desea ayudarnos. Mi esposo y yo conocíamos a Dios por ese entonces, sin embargo no sabíamos cómo eran sus caminos, no comprendíamos principios que están en la Biblia y que nos ayudan para ser buenos mayordomos y administradores. Estábamos haciendo las cosas de una manera inteligente, mas no de una manera sabia. Y eso nos llevó finalmente a perderlo todo. Nosotros también nos preguntábamos ¿porqué todo nos sale mal? Sin comprender que eran nuestras propias decisiones las que nos estaban evitando salir adelante. Si te identificas con esta situación, mi deseo es que sepas que siempre hay esperanza, porque tenemos un Dios vivo y todo poderoso que nos ama. Quizás ahora mismo estás pensando, “pero si yo todo lo he tratado de hacer bien, pero si yo he tratado de buscar a Dios, pero si yo he orado”. Y te puedo decir que mi esposo y yo nos sentíamos de la misma manera. Pasó un largo tiempo en el que Dios nos estuvo enseñando a caminar haciendo las cosas a su manera, antes de ver que las cosas mejoraran, Fue necesario hacer cambios que no sabíamos eran necesarios para poder ver la victoria. Pero finalmente te puedo compartir que Dios es fiel, desde entonces El nos ha llevado a través de un camino de éxito en todas las áreas de nuestra vida y confiamos que lo seguirá haciendo.
Oración: Padre bueno, perdóname porque muchas veces he tomado decisiones sin consultarte pensando que era lo mejor. Tú sabes la situación en que me encuentro, me siento confundido, atemorizado desanimado y desesperado. Te abro mi corazón y te rindo mi vida una vez mas, por favor ayúdame, deseo aprender de ti. Dame de tu sabiduría para salir adelante, aun si necesitas corregirme. Te pido de todo corazón que hagas tu voluntad en mi vida, te lo pido en el nombre de Jesús. Amén. Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey. Nos gustaría orar por ti. Déjanos tu petición de oración.
1 Comment
Misael Orrostieta
9/13/2021 09:33:31 am
Siempre una bendición recibir tus mensajes Laura.
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AutorCreo que no soy nada especial como para hacer grandes cosas; sin embargo, se que tengo el favor de Dios. Categorias
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