Hola querida familia y amigos, como les comenté en días pasados, este año mi propuesta es escribir al menos una vez al mes y compartirles sobre “como oro por mis hijos”. Los que leen continuamente el blog, saben que mi deseo es escribir y compartirles cada semana, sin embargo, éste año me encuentro con demasiadas ocupaciones. Continúo con las clases de Biblia para mujeres, aprendiendo y compartiendo. Después de todo, ya sea en grupos pequeños, en grupos de mujeres, o en la universidad, aprender de la Palabra de Dios sigue siendo parte de mi crecimiento personal desde hace más de dos décadas. Amo estudiar la Palabra de Dios ya que verdaderamente creo que es parte importante y vital para descubrir y disfrutar la vida plena que Jesús vino a darnos. (Lee Juan 20:10) Además, gracias a Dios el ministerio para matrimonios está creciendo, “Matrimonios Que Avanzan”. Se están abriendo nuevas clases, Dios está trayendo más gente para apoyar, y lo más importante, más matrimonios están siendo transformados y fortalecidos por Dios a través de las clases y eventos de este ministerio. Por otro lado, les comparto la alegre noticia de que estoy trabajando en un nuevo libro que pronto espero compartirles. En fin, confío que ya sea cada semana o cada mes, Dios continuará hablándoles a través de este blog. Gracias a cada uno de ustedes por su apoyo y oraciones, siempre me anima leer sus comentarios, ya que me reafirma que lo que hago no es en vano. Y por supuesto me alegra mucho saber que hay alguien orando por mí. Esta semana me gustaría compartirles, como oro por mis hijos en tiempos cuando me parece difícil desarrollar mi papel de madre, me refiero más que nada, a cuando veo que su comportamiento es rebelde. Esta oración nos ayuda para ponernos de acuerdo con Dios en una verdad muy importante. Somos sus hijos, Y es Su deseo que su Santo Espíritu, al igual que a nuestros propios hijos, nos ayude, nos enseñe y nos dirija cada día de nuestra vida; para así caminar realmente en su voluntad y no desviarnos de ella. Es entonces cuando viviremos lo que nos dice Romanos 12:2. “No te conformes a lo que el mundo te ofrece.....transformate.....para que vivas la voluntad de Dios; la cual es buena, agradable y perfecta” Suelo orar usando las promesas que encuentro en que la Palabra de Dios, porque su Palabra es poderosa y eficaz, y siempre se mueve y hace cambios en el ámbito espiritual. Isaias 55:11 y Hebreos 4:12 l (NVI) Así será mi palabra que sale de mi boca, no volverá a mí vacía sin haber realizado lo que deseo, y logrado el propósito para el cual la envié. Ciertamente, la palabra de Dios es viva y poderosa, y más cortante que cualquier espada de dos filos. Penetra hasta lo más profundo del alma y del espíritu, hasta la médula de los huesos,y juzga los pensamientos y las intenciones del corazón Suelo orar dando gracias a Dios, porque para mí es la manera de decirle a Dios que no me voy a preocupar más, sino que voy a orar y a confiar en El, porque realmente si creo que El es poderoso y me ama, y El va a obrar en consecuencia a mí oración. Como nos dice Filipenses 4:6 (NVI) "No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias" Permiteme compartirte esta oración, te propongo hacerla sin fallar durante todo el mes, en voz audible y confiando que Dios va a respaldar y cumplir su Propósito, y veras que cuando menos te lo esperes, empezaras a ver cambios en la actitud de tus hijos y la tuya misma. Yo soy testigo de esto, sin embargo, la oración la tenemos que adoptar como un estilo de vida si realmente queremos ver cambios reales en nuestra vida y familia. Les amo y están en mis oraciones. “Padre bueno. Dios grande y poderoso, te alabo! No hay nadie como tu! Solo tu eres el Dios maravilloso que creaste el mundo y todo lo que en el hay*. Padre bueno, rey de toda la tierra. Hoy quiero decirte que por mi parte, mi familia y yo, y toda mi descendencia te serviremos a ti. Gracias Señor porque yo y cada uno de mis hijos, (nombres de tus hijos _________________) ahora somos nuevas criaturas*, todo lo viejo pasó y he aquí somos hechos nuevos. Somos tiernos amorosos, adoradores tuyos en espíritu y en verdad*. Gracias porque Tu Gozo es nuestra fortaleza*, somos alegres, amables, creativos y diligentes. Lectura para avanzar, Todas las citas son en (RVR1960) a menos que se indique lo contrario,
Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey
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El otro día una compañera de clases me preguntó,
El ver la preocupación constante de una madre, me hizo pararme a reflexionar, que aprender a orar por nuestros hijos de tal manera que veamos resultados, es algo muy valioso para toda madre. No te parece? Si quiero que algo diferente pase, la situación me dice que tengo que hacer algo diferente. Por eso es que mi propósito de este 2020 es compartir por lo menos una vez al mes una oración para nuestros hijos. Hoy me gustaría compartir contigo una de mis oraciones preferidas, Ya que esta oración tiene el poder de cambiar la mentalidad de los hijos cuando andan fuera de los caminos de Dios o simplemente están un poco alejados o no tienen una relación profunda con El. Pero antes me gustaría hablar un poco sobre la oración. Como todos sabemos, la oración es hablar con Dios, es comunicarte con El desde tu corazón. Si lo que le pedimos, también lo creemos en nuestro corazón, entonces nos será hecho, ya que sin fe es imposible agradar a Dios. (Lee Hebreos 11:6). Como está escrito en Marcos 11:23-24 NVI, “Les aseguro que, si alguno le dice a este monte: “Quítate de ahí y tírate al mar”, creyendo, sin abrigar la menor duda de que lo que dice sucederá, lo obtendrá. Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración, y lo obtendrán.” Más sin embargo, aparte de hablar con Dios con mis propias palabras, a mi me gusta orar usando las promesas de Dios. Porque lo hago así? Permíteme decirte tres razones.
“Así será Mi palabra que sale de Mi boca, No volverá a Mí vacía Sin haber realizado lo que deseo, Y logrado el propósito para el cual la envié.” Me gustó mucho esta versión que dice “así es también la palabra que sale de mi boca: No volverá a mí vacía, sino que hará lo que me place y cumplirá con mis propósitos.” (Isaías 55:11 NVI) La Palabra de Dios hace lo que a El le place. Entonces cuando oramos hablando la Palabra de Dios, y enviamos esa palabra confiando en nuestro corazón que Dios es poderoso, podemos esperar que Dios va a trabajar con esa palabra, porque su palabra es espíritu y llega a lo profundo del corazón y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. (Lee Hebreos 4:12-13) Yo misma lo he visto! Cuando he orado así, la Palabra de Dios va y trabaja en el ámbito espiritual haciendo cosas sobrenaturales, y entonces después lo veo manifestado en el ámbito material. 3. La Palabra de Dios es su perfecta voluntad, como está escrito, a veces no sabemos bien cómo pedir lo que nos conviene, pero Dios lo sabe todo, (Lee Romanos 8:26). Entonces al nosotros orar con las promesas de Dios, estamos orando la perfecta voluntad de El. El punto es; sea cual sea tu estilo para orar, sólo busca un momento a solas, abre tu corazón y exalta al Dios poderoso que te ama y siempre está dispuesto a escucharte. Entonces ora con esta oración que está llena de Sus promesas sobre tus hijos y verás como siendo constante, después de algún tiempo de orar con ella diariamente empezarás a ver cambios favorables. Recuerda, Si quieres ver la victoria en todas las áreas de tu vida, tienes que ser diligente en la oración. “Gracias Señor porque eres bueno y Padre de misericordias, solo tu eres el Dios de toda la humanidad y no hay nada imposible para ti. Padre bueno, yo creo en tus promesas, gracias porque cómo está escrito, mi familia, mis hijos ____________ y yo somos tu pueblo y Tu eres nuestro Dios. Haz hecho que haya coherencia entre nuestro pensamiento y nuestra conducta, a fin de que siempre te temamos, para nuestro propio bien y el de nuestros hijos. Gracias porque haz hecho con nosotros un pacto eterno: Nunca dejarás de estar con nosotros para mostrarnos tu favor. Has puesto tu temor en nuestros corazones, y así nunca nos apartaremos de ti. Te regocijas en favorecernos, y con todo tu corazón y alma nos plantarás firmemente en esta tierra, como tú lo has afirmado. Gracias Señor, porque tú cumples tus promesas. Has cambiado nuestra suerte y nos has dado para siempre tu bendición».”En el nombre de Jesús. Te adoro Señor. (Lee Jeremías 32:27, 36, 38-41, 44 ; Salmos 21:1-7 NVI) Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey En estos días, tristemente el matrimonio está siendo muy atacado en todos sus sentidos, se ha llegado a distribuir la idea de que no es tan importante o necesario estar casado, sin embargo, desde el inicio de la creación el matrimonio fue el plan perfecto de Dios creado para vivir en perfecta armonía con tu pareja. Por otro lado, es una realidad que el matrimonio está siendo expuesto más constantemente a la infidelidad debido a las tentaciones, es decir, por las tentaciones en Internet, o aun en la calle. Las tentaciones nunca van a parar, están puestas por el enemigo para coquetear con nuestras debilidades y lograr destruir la relación. Sin embargo, un punto muy importante para evitarlo es volver a darle el valor que tiene a la relación dentro del matrimonio. Es desear de corazón cuidarlo como algo digno de honrar. Es tomar la decisión en tu corazón de evitar todo tipo de tentaciones para ser completamente fiel, con la mirada, con los pensamientos, pero también con el corazón. Es recapacitar sobre lo que realmente es el matrimonio a los ojos de Dios, que fue quien lo diseñó. El matrimonio es la relación ideal donde cada persona tenemos el potencial para desarrollar los dones y talentos que Dios nos dio. Es donde al paso del tiempo con amor y sabiduría, se va construyendo una relación sólida y podemos sentirnos apreciados, acompañados, respetados y valorados, pero sobretodo amados. Es la relación donde puedes sentirte realmente complementado, ya que tu esposo es la única persona con la que tu entrega es total y te fundes en uno solo. Es el lugar perfecto para tener intimidad, ya que la relación sexual es honrosa y pura dentro del matrimonio y tiene la bendición de Dios. Como está escrito, “Por lo tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne" (Génesis 2:24 RVR1960). Podría decir muchas cosas más sobre el matrimonio, sin embargo, hoy me gustaría que pusieras en práctica un principio, que no importando el lugar donde estés en tu relación, mejorará tu matrimonio.
Permíteme explicarme. 1 Juan 4:19 nos dice, Nosotros Amamos a Dios porque El nos Amó Primero Esto me habla que para yo poder amar a Dios; primero El tomó la decisión de amarme. Quiero decir, Dios dió el primer paso, tomó la decisión de amarnos sin tomar en cuenta nuestros defectos, nuestra manera de ser tan imperfecta o aún nuestros errores del pasado. Estuvo dispuesto a dar su vida y entregarse tan sólo por amor. No porque nos lo hubiéramos ganado o siquiera lo mereciéramos, sino más bien porque para El somos valiosos, Dios Tomo el Primer paso, Y Decidió Amarme, El aplicó el principio de la siembra y la cosecha, el cual nos dice, que lo que siembras, eso mismo cosechas (Gálatas 6:7) Dios Sembró Amor en mi, y en Consecuencia Ahora yo lo Amo. De igual manera, contestando la pregunta inicial, -Qué puedo hacer para que mi pareja me ame más? Simplemente sigue su ejemplo, Ama Primero Es decir, cuando tú decides dar el primer paso de amar a tu pareja y entregarte, la consecuencia será que te amará aún más. Porque tu al igual que Jesús, decidiste amar primero. Sin embargo, amar no es una palabra hueca. Cuando tomas la decisión de sembrar amor, y amar a tu pareja a pesar de sus defectos y errores. Decides valorarla, honrarla, serle fiel, y empiezas a dar pasos y acciones que muestren amor diariamente. Y es entonces, que al igual que cualquier fruto que siembras, en su tiempo vas a cosechar su amor. El reto para la semana sería, De la misma manera que Dios lo hizo, voy a amar primero a mi pareja. Sin esperarme a recibir muestras de amor de su parte, yo voy a mostrarle mi amor primero, a pesar de cualquier defecto, o error que vea. Voy a decirle. Te Amo Porque Deseo Amarte I Love You Because... Pon en práctica este valioso principio. Sigue el ejemplo de Jesús y cuando menos te lo esperes estarás recibiendo mas de lo que entregaste. Como nos dice en Lucas 6:38 “ Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo”...Lucas 6:38 (RVR1960) Les amamos y estamos orando por ustedes. Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey El otro día salimos a cenar mi esposo y yo para festejar mi cumpleaños. Pasamos un tiempo muy especial, ya que nuestro corazón se sentía muy agradecido. Estuvimos compartiendo una rica comida, y realmente todo nuestro tema de conversación fue siempre dirigido por la gratitud que sentimos ambos por tener a Dios en nuestras vidas. Platicábamos de lo alegres que estamos por todas sus bondades. Han pasado más de 25 años desde que le abrimos al Señor nuestro corazón, y podemos apreciar que gracias a El ahora somos una familia que lo amamos y su presencia está con nosotros. Todos en casa tenemos salud, paz, y vamos avanzando, sabemos que El siempre está con nosotros y nos protege, estamos agradecidos porque cada día vemos su provisión y su cuidado sobre nuestras vidas, En fin, pasamos una velada muy bonita al recordar todas sus bondades. Creo que da mucha más satisfacción tener un corazón alegre que una gran cena. Ese mismo día me desperté en la madrugada meditando precisamente en todas sus bondades y platicando con el Señor. Me puse a meditar sobre el pasaje en el libro de Josué 1:8 cuando el Señor nos dice, meditarán en mis palabras y tendrán éxito en todo y todo les saldrá bien. Vino a mi corazón una enseñanza que me gustaría compartir contigo, Todo te Saldrá Bien Creo que todos en esta vida deseamos tener éxito, deseamos alcanzar lo que nuestro corazón anhela, ya sean las metas que tenemos en nuestro trabajo, o cambios que deseamos en nuestro hogar o cambios personales, o mejorar nuestra relación, o algo que a mi ver es muy importante, desarrollar una familia unida que se apoyen, se amen, y conozcan al Señor. Creo que en el fondo de nuestro corazón, sea cual sea nuestra situación, cada uno deseamos estar siempre avanzando hacia lo mejor. Y para lograr esto, Dios nos da un principio básico. Éste principio es uno de los tesoros escondidos y secretos bien guardados que nuestro Padre tiene para cada uno de nosotros. (Lee Isaías 45:3). Está escrito en Josué 1;8 “Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.” En la primera parte de este versículo se nos dice, “Que nunca se aparte de tu boca” Esta es una acción muy importante por hacer, la cual nos corresponde a cada uno de nosotros llevarla a acabo, que nunca se aparte de nuestra boca la Palabra de Dios. Sin embargo, no sé si te ha pasado, pero si reflexionamos un poco quizás nos daremos cuenta que muchas veces de nuestra boca no sale de manera natural lo que Dios dice al respecto, yo misma lo he vivido; pero ¿porqué crees que es difícil hablar en el momento en la vida cotidiana lo que Dios dice de la situación? La parte que sigue a esa frase en Josué 1:8 nos da la respuesta, enseguida nos dice, “Meditarás en ella de día y de noche” Esta es otra acción que nos corresponde a nosotros hacer. Siendo sinceros, ¿estamos meditando en la palabra de Dios de día y de noche? Creo que muchas veces nos pasa que estamos meditando de día y de noche en las situaciones que vivimos, en los problemas que tenemos alrededor, y hasta en el programa de Netflix o en la novela que estuvimos viendo. ¿Te ha pasado? No digo que no podamos pensar en otra cosa que no sea fuera de la Palabra de Dios, Por supuesto que hay que pensar en la vida cotidiana para cosas buenas, como planear, o prever, o tomar decisiones sabias; sin embargo, si Dios nos instruye que meditemos en su Palabra de día y de noche, es porque Él desea que lleguemos a un punto en que nuestro corazón esté tan lleno de su Palabra, que cuando nos enfrentemos ante una situación difícil o un problema de la vida diaria, pueda salir de nuestro corazón la Palabra de Dios y no la duda, o desesperación. El desea que en lugar de mirar las circunstancias y quedarnos meditando en ellas, podamos caminar de una manera diferente, como El mismo nos anima, caminar por fe. (lee Hebreos 10:38) “Mas el justo por la fe vivirá”. a promesa que nos da el Señor en este versículo de Josué: 1:8 es impresionante, porque se nos dice al final, “Y entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.” Aquí podemos notar la palabra entonces, esto quiere decir que cuando nosotros hacemos o llevamos a cabo la primera parte del versículo, entonces la consecuencia se va a ver reflejada, es cuando verdaderamente todo nos saldrá bien y prosperaremos. A veces en la vida nos encontramos con circunstancias que nos desaniman o nos dan tristeza, y por lo mismo nos llevan a preguntarnos si será la voluntad de Dios o no, circunstancias que nos gustaría fueran diferentes. Cómo por ejemplo, cuando llevas tiempo buscando trabajo y no logras encontrar el adecuado. O cuando tienes una meta en tu trabajo que no logras alcanzar. O cuándo te gustaría ver que tus hijos fueran por el buen camino y no lo ves venir. Lo cierto es que puede haber muchas circunstancias de nuestra vida que no concuerden con la parte final de este versículo que nos dice, y todo nos saldrá bien y prosperaremos. Pero acaso es Dios mentiroso? por supuesto que no! Dios es justo, fiel y bueno, y en El no hay mentira, como está escrito “...sea Dios veraz y todo hombre mentiroso” (Lee Romanos 3:4 ) Es decir, nosotros podemos equivocarnos pero Dios no se equivoca, ni tampoco miente. Dios sabe lo que es mejor para nosotros, Dios nos ama intensamente, y por el amor que nos tiene, En la vida práctica, cómo puedo llevar a cabo los principios de este versículo? Permíteme compartirte tres sencillos TIPS que te llevarán a lograrlo. 1. Habla la Palabra de Dios. Desarrolla el buen hábito de hablar lo que Dios dice de tus circunstancias a tus circunstancias. Es decir, cuando te encuentres frente a una situación cotidiana que te quiere desanimar, en lugar de ponerte a hablar lo que está sucediendo, y a repetirlo vez tras vez a tus compañeros de trabajo, a tus amigos o a tu familia, habla de una manera positiva lo que Dios diría al respecto. 2. Medita de día y de noche en la Palabra de Dios. Es decir, busca la manera de estar leyendo la Palabra de Dios continuamente. Ten a la mano tu Biblia, o baja la aplicación de YouVersión en tu celular. Durante el día ve a la Palabra de Dios, lee un par de versículos y medita sobre ellos Meditar quiere decir, ”pensar profundamente”, es decir piénsalo y en tu mente desmenúzalo. Trata de comprender lo que Dios te está diciendo con este versículo, de esta manera estarás llenando tu corazón con la Palabra de Dios, y cuando venga la circunstancia que te quiere desanimar, saldrá naturalmente de tu boca precisamente eso, la Palabra de Dios, y entonces estarás caminando por fe y no por vista. Cuando por ejemplo tu cheque llegue más bajo de lo que tú pensabas, en lugar de decir, “Vamos a ver qué pasa a la siguiente semana” o ”ya me lo imaginaba que así iba a llegar” o “siempre es lo mismo”, etc. Entonces, después de haber meditado en la Palabra, tu corazón estará lleno y podrás decir, ”gracias Señor por este cheque, yo sé que tú provees todo para mi vida conforme a tus riquezas en gloria, yo sé que tú multiplicas y bendices la obra de mis manos. Gracias” Entonces se cumplirá la parte final de Josué 1:8, y entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.” 3. Confía en Dios. Es decir, confía que cuando tu haces tu parte, leer y meditar su Palabra, El hará la suya, Todo te saldrá bien. Éste principio, es un tesoro escondido en la Palabra de Dios que El desea que todos sus hijos lo practican, porque cuando vamos llenando nuestro corazón con su Palabra y meditamos en ella, nuestros pensamientos van a empezar a ser transformados, y las cosas que antes veíamos de una manera negativa o las circunstancias que pensábamos eran muy difíciles de lograr van a empezar a cambiar, ya que empezaremos a verlas como algo posible. Caminaremos como lo haría un niño, plenamente confiado que todo estará bien porque papa esta con el. Empezaremos a caminar por fe y no por vista, es decir, en nuestra vida diaria empezaremos a ver las cosas de manera diferente, ya que nuestro corazón estará completamente confiado en Dios. Dios desea llevarnos a vivir todas las cosas buenas que El tiene para nosotros, El desea llevarte a lograr esas metas que anhelas en tu trabajo, a poder vivir una profunda amistad de amor con tu pareja, a mirar como tus hijos se acercan cada día más a Dios y lo amen. El desea buenas cosas para ti. Porque Yo sé muy bien los pensamientos y planes que tengo acerca de ti, —afirma el Señor—, pensamientos de paz y bienestar, y no de mal, a fin de darles un futuro y una esperanza. (Lee Jeremías 29:11 ) Lo que Él necesita de ti, es que tomes en serio este valioso principio y tomes la decisión de profundizar más en su Palabra. Tome la decisión en tu corazón, y no te dejes robar más la bendición. Sé que a veces puede parecer difícil cambiar nuestros hábitos diarios, y más cuando el enemigo está dispuesto a hacernos retroceder, pero tenemos que ser sabios. Tenemos que ser como Josué, valientes y esforzados para permanecer practicando este principio. Te animo a que busques la manera para que cada día puedas perseverar leyendo y meditando en la Palabra de Dios más continuamente. Dispón tu corazón y pídele al Señor que te ayude a lograrlo. Busca esos momentos en los que puedes leer la Palabra y entonces medita en ella, mientras estés trabajando, caminando, manejando, o cocinando. La idea es crear el buen hábito de empezar a cambiar nuestros pensamientos o nuestra manera de pensar por los pensamientos de Dios, porque entonces veremos como prosperamos en todo y todo nos saldrá bien. Te gustaría orar conmigo? Oremos en acuerdo, “Padre bueno, te doy gracias por este día, sé que muchas veces en mi diario vivir suelo estar pensando negativo y la verdad es que ni siquiera me acuerdo de ti. Pero estoy decidido a cambiar, quiero ser como Josué, valiente y esforzado para meditar tu Palabra. Quiero cambiar primeramente yo para ver cambiar mis circunstancias, ayúdame por favor. Perdóname todos mis pecados y aun los que no recuerde, Señor Jesús ven a mi corazón y se el Señor de mi vida. Dirige mis pasos en tus caminos, y ayúdame a afirmar mis pensamientos en tu Palabra. Dame de tu gracia para desarrollar el buen hábito de leer y meditar en tu Palabra de día y de noche. Laura G Munoz En mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey El otro día por la mañana meditando, vino una enseñanza a mí corazón, me desperté pensando en una nueva estrategia que el enemigo está usando para destruir los matrimonios y las familias. Después de todo el enemigo de Dios no descansa, él está trabajando para destruir todo lo que Dios ama, entre esas cosas, están las familias y las personas que las forman. Como está escrito, el enemigo vino a robar matar y destruir, pero Jesús vino a darnos vida y vida en abundancia. (Juan 10:10) Empecé a recordar que hace tiempo leí un libro que se llama, “El campo de Batalla de la Mente“ de Joyce Mayer. No se si lo conozcas. Es un libro buenísimo que habla sobre cómo Satanás te mete pensamientos de duda, de temor, inseguridad, para apartarte de tu relación con Dios y para detener finalmente el avance de los planes que Dios tiene para tu vida. Definitivamente es una estrategia del enemigo, trabajar en la mente de las personas. Pero meditando sobre esto, creo que ahora tiene una nueva estrategia que es como la humedad en una casa, se va metiendo poco a poco sin que siquiera lo notes, pero cuando ya está totalmente extendida, destruye todos los fundamentos, hasta dejar una obra inservible. Lo mismo pasa con esta nueva estrategia, va destruyendo poco a poco sin que apenas lo notes, pero a tal grado que destruye totalmente la base de las relaciones. Se llama "LA INDIFERENCIA". Permíteme explicarme con un ejemplo, imagina por un momento una familia de los años cincuentas y la convivencia que ellos tenían. Solían desayunar juntos, bendecir los alimentos, platicar el uno con el otro, lo más común es que el papá se iba al trabajo mientras la mamá se quedaba y trabajaba en los quehaceres del hogar o en un trabajo de medio tiempo pero que le permitiera estar con su familia y así desarrollar buenas relaciones con la familia. Por otro lado, en estos tiempos he notado como en algunas familias, aunque están reunidos en un mismo lugar, no están juntos, no están conectados, no están desarrollando relaciones reales, el vínculo emocional está débil. Porque aunque su mente no está viviendo en la batalla de la mente, parece que ahora la batalla de la mente está en pausa, pero no porque el enemigo se haya tomado un descanso en su actividad para destruir a las personas y las familias, más bien es porque ahora su estrategia es la indiferencia. Ahora puedes ver a una familia reunida en el mismo lugar, pero cada quien atendiendo lo que sus pensamientos lo llevan a hacer, quizás estén en su celular viendo mensajes, o estén jugando algún deporte en el IPAD, o estén jugando algún juego en el celular, o estén mirando y “divirtiéndose”, viendo juntos un programa de televisión. Esto puede parecer un buen pasatiempo, pero la realidad es que finalmente los temas de conversación en común cada vez son más escasos. Por Causa de la INDIFERENCIA, Antes podías llegar a una reunión, iniciar un tema con la persona de al lado, y así cada persona iniciaba conversación con el más próximo, hasta que después de un rato todos en la mesa estaban conversando el uno con el otro, en una gran charla. Al final de esa reunión, ya conocías un poco más sobre la persona que estuvo a tu lado, quizás ya se habían reído juntos, ya habían platicado chistes, o quizás habían tenido la oportunidad de platicar sobre momentos tristes o tensos de su trabajo, pero al fin y al cabo se estaban desarrollando los vínculos emocionales, esos lazos que no los ves físicamente pero que hacen crecer las relaciones. Meditando sobre esto, - No es acaso de esto de lo que se trata la vida? De conectar emocionalmente con las personas y desarrollar buenas relaciones? - No es acaso lo que Jesús nos mando hacer? Llegar a amarnos unos a otros? - Y cómo podemos llegar a lograr esto si no desarrollamos una relación con las personas? Lo que antes era común, ya no es tan común, tener un tema de conversación para platicar entre si, para así desarrollar relaciones. Ahora, en medio de lo que debería de ser un ambiente cálido y fraternal cómo es la familia, ahora, al estar cada quien entretenido en sus propios pensamientos y entretenimientos, las relaciones se han ido enfriando. La indiferencia se ha estado metiendo como la fría humedad. La indiferencia se ha estado metiendo como la fría humedad. Verás, la indiferencia es como la humedad, porque la humedad se va metiendo poco a poco sin que apenas lo notes y llega a destruir totalmente los fundamentos de una casa, hasta hacerla totalmente inservible, inhabitable. Lo mismo puede pasar con la indiferencia, llegar a filtrarse de tal modo en las relaciones de la familia, que cuando menos lo esperes, las relaciones se deterioren a tal grado que lleguen a ser como dos extraños viviendo bajo el mismo techo. Eso es lo que quiere finalmente lograr el enemigo. Esta es su nueva estrategia, meter la indiferencia en la familia poco a poco de tal modo que no lo notes. Porque el no nos desea ningún bien, como está escrito, “Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes.” Efesios 6:12-14 Reina-Valera 1960 (RVR1960) Mi oración es que reflexionemos sobre esta situación, y tomemos cartas sobre el asunto, no dejemos que nos pase como dice la escritura, “Porque el corazón de este pueblo se ha vuelto insensible; se les han embotado los oídos, y se les han cerrado los ojos. De lo contrario, verían con los ojos, oirían con los oídos, entenderían con el corazón y se convertirían, y yo los sanaría”.” Mateo 13:15 Nueva Versión Internacional (NVI) Más bien pidamos a Dios sabiduría, para hacer cualquier cambio que tengamos que hacer en nuestros hábitos, y así, intencionalmente conectemos con nuestra familia de nuevo. Recordemos que Dios nos ama y siempre está con nosotros. Oremos juntos, "Padre bueno, hoy te doy gracias por este día, te pido perdón por a veces ser negligente y tomar el camino más fácil para mí recreación personal, alimentando mi mente con toda clase de juegos, películas y distracciones en lugar de desarrollar las relaciones. Te pido que me des la sabiduría, las estrategias, y sobretodo de tu gracia para cambiar cada hábito que tenga que cambiar en mi vida y en mi hogar, para así mejorar. Deseo realmente conectar con mi familia, ayúdame a desarrollar buenas relaciones con cada uno de ellos, porque mi corazón está dispuesto. Gracias Señor por morir en esa cruz en mi lugar y resucitar. Te reconozco como el Señor de mi vida, y te pido que vengas a mi corazón. Todo te lo pido en el nombre de Jesús, amén" Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey Algunas veces tenemos muy buenos recuerdos sobre nuestra relación papá e hijo, y eso es hermoso, sin embargo otras veces no son tan buenos esos recuerdos. Cierto? Recuerdas como fue tu Papá mientras crecías? Espero que su recuerdo de alguna manera te haga sonreír... Permíteme platicarte sobre un recuerdo muy especial que tengo de mí niñez. Mi Papá solía ser muy enérgico en su manera de educarnos, sin embargo aún recuerdo lo bello que era para mí cuando a mis 5 o quizás 6 años, el me sentaba en sus piernas y me cantaba mientras movía sus piernas subiéndolas y bajándolas. Mientras lo hacia, me miraba al cantar y de repente parecía que solo el y yo existíamos. No recuerdo que fuera muy seguido que lo hacia, pero cuando esto pasaba me hacia sentir tan querida, tan cuidada, tan especial. Era una sensación de saber que él estaba ahí siempre para cuidarme y protegerme. Era saberme amada por alguien. Por otro lado, a veces sabia y sentía que estaba muy ocupado para atenderme, y me sentía muy sola, pensando que no le interesaban mis asuntos. Conforme pasó el tiempo y fui creciendo, ya no lo buscaba como antes ni el a mi, cierta forma sentía que no lo necesitaba igual que antes, puesto que ya había crecido, según yo ya era madura. El tiempo paso hasta llegar momentos en que ya no le contaba ningún suceso en mí vida, a pesar de que sabia su amor por mi. Tristemente a veces así pasa en la vida, no te parece? Ya sea por situaciones personales, por errores que dejamos pasar sin aclarar o simplemente porque nos vamos de casa para iniciar nuestra propia familia. Pero llega un momento en que te das cuenta que tu “Papa” no puede estar ahí para ti en todo momento aunque quisiera, ni tampoco tu le contarías todo lo que te pueda preocupar en un día. Y definitivamente no es la falta de amor, es simplemente el hecho de crecer, madurar y salir de casa, por lo que ya no tienes al Papa que te sentaba en las piernas y te cantaba, ese Papá que siempre estaba ahí para escucharte, abrazarte o darte una palabra de animo. Ese “papa” que te hacia sentir protegido. El tiempo pasa, la vida cambia y las cosas no vuelven a ser igual Pero sabes, la buena nueva es que seguimos teniendo un Papá que si tiene todo el tiempo, amor, dedicación y sabiduría para estar ahí y ocuparse de nosotros cada día, Nuestro Padre Celestial que hoy te dice: “Hijo, hija, Cómo has pasado tu día? Cómo fue la semana pasada? Necesitas ayuda hoy? Acaso eres tú quien tiene esa situación que te preocupa?No tienes porque pasar esto solo. El es nuestro Padre Amado que nos tiene paciencia, ternura y anhela platicar contigo. Al hacerlo, encontrarás descanso para tu alma y paz para tu corazón. Dios es bueno y su misericordias son nuevas cada mañana, al platicar con Él cada día vamos aprendiendo que no hay nada demasiado grande, o demasiado triste para mantenernos preocupados por lo que fue o será. Hoy, para un momento, deja de lado las ocupaciones y platica con Él. Experimenta la paz y alegría que nos da estar ante Papa, El nos invita a acercarnos, Mira lo que nos dice: Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. (Hebreos 4:16) Esa es la verdad, somos sus hijos y siempre que lo deseemos podemos acercarnos confiados para recibir su ayuda, podemos caminar cada día tomados de su mano. Podemos volver a experimentar el sabernos protegidos y amados. No dejes pasar otro día más preocupado o triste por algo que Él sí puede sanar, aliviar, suplir. El es Dios, El es el gran Yo Soy, El es tu Papá quien te ama tanto tanto tanto...... Si hoy sabes que lo necesitas y te gustaría decírselo, vamos, oremos juntos: "Amado Padre, tu conoces mi situación, sabes todo lo que he vivido y cuanto te necesito. Aunque no me he acercado últimamente a ti, puedo comprender cuanto me amas porque fuiste capaz de mandar a tu hijo Jesús a morir en la cruz, para después resucitar y pagar por todos mis pecados. Perdóname, se que te he ofendido y que es por tu gracia que un día podre estar toda la eternidad contigo. Gracias Señor Jesús por ser mi salvador, hoy te abro sinceramente mi corazón y te pido que seas el Señor de mi vida. Padre bueno, ayúdame a conocerte más, que cuando lea tu Palabra la pueda entender y practicar. Enséñame también a caminar todos los días de mi vida tomado de tu mano, sintiendo como me guías, ayudas y escuchas como tu hijo/a. En el nombre de Jesús. Amen." Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey El que Ama Sabe ser Agradecido. Alguna vez has pensado que el ser agradecido es una parte importante en el matrimonio? Es algo que puede cambiar el totalmente el rumbo de tu relación? Permíteme platicarte sobre esto, El otro día mientras desayunaba en un restaurante, me tocó ver a una joven pareja con dos niños pequeños. Ella estaba tratando de colocar al más pequeño en la silla para niños, mientras el mayor quería salirse del asiento para irse a correr, seguramente quería jugar. En eso, en medio de esa escena me tocó ver cómo la joven esposa volteaba sonriendo hacia su esposo y con una mirada tierna le decía,
En eso vino una enseñanza a mi corazón que me gustaría compartirte, Cuando damos un gracias, no tan solamente es una palabra amable, al decir “gracias” estás diciéndole a la otra persona,
El que Ama Sabe ser Agradecido Aunque decir gracias puede parecer algo muy cotidiano o quizás insignificativo, la verdad es que aprender a ser agradecido en las pequeñas y en las grandes cosas, es una muestra de amor hacia tu pareja, y siempre que lo pongas en práctica va a traer armonía, libertad y amor a la relación. El día de hoy el reto para nosotros sería, Intencionalmente voy a poner atención en esos detalles diarios que mi pareja hace para agradarme, y con una mirada que le muestre mi aprecio le voy a decir, "Gracias mi amor" Somos Matrimonios que Avanzan, deseamos conocer lo mejor que Dios tiene para nuestras vidas, y el ser obedientes a su Palabra nos ayuda a descubrirlo y nos trae bendición a la relación. Por eso hoy pondremos en práctica Dar gracias por todo, como nos dice 1 Tesalonicenses 5:18 (RVR1960) "Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús." Que esta temporada de acción de gracias, se convierta en un estilo de vida en el cual demos gracias por todo a nuestro esposo (a). Les amamos y estamos orando por ustedes Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey -Cómo Heredo Mi Promesa? ¿Alguna vez te has sentido desilusionado porque estuviste esperando algo que anhelabas por largo tiempo y no se dio? A pesar de que estuviste confiando que llegaría, por momentos perdiste la esperanza, ¿y pareciera que nunca llegó? Y quizás ahora, después de pasado el tiempo, realmente ya no sabes si llegará, si de algún modo valió la pena confiar o abrigar la ilusión en tu corazón, por momentos reflexionas si acaso valió la pena esperar tanto tiempo. Es cuando llega un momento en que te paras a preguntarte,
Recordando a una querida amiga que se encuentra en una situación similar, esperando y esperando por una promesa. Estaba pensando, tratando de escuchar al precioso Espíritu Santo, y a la vez preguntándome... ¿Qué pasa cuando has pedido algo, cuando has esperado, cuando has confiado, cuando has anhelado con todo tu corazón esa promesa, cuando has puesto tu confianza en Dios, y aun así pareciera que no llega, pareciera olvidado en el tiempo? Te ha pasado? Estando ahí en medio de mis pensamientos, vino a mí un recuerdo y una enseñanza que me gustaría compartirles: Cuando era yo una niña, pequeña (bueno, siempre he sido pequeña. ja,ja). Tendría tal vez unos 6 o quizás 7 años de edad, recuerdo que yo anhelaba tener una muñeca, pero no era una muñeca ordinaria, al menos eso pensaba yo, era una muñeca que si la tomabas de la mano, caminaba contigo, (guau) y aparte hablaba (guau) y cantaba, (guau) una muñeca que a mi ver era la más bonita de todas. Y claro, primero empezó como un anhelo en mi corazón, un deseo, sin embargo no me atrevía a pedirla, porque aunque era niña yo pensaba que mis papas no la querrían comprar, o quizás, aunque quisieran no la podrían comprar, ya que en aquel tiempo éramos 8 hijos y muchos juguetes por complacer, :) no lo se, pero yo lo veía como algo imposible de tener. Pasó el tiempo, y sólo me atreví a escribirlo en mi diario como solía hacerlo, dirigiendo mis palabras a Dios, confiando que tal vez un día la tendría. No sabia como, pero tal vez un día mis papás quisieran cumplir mi deseo o quizás tuvieran la provisión para dármela o me llegaría con Jesús en navidad. Así pasó el tiempo, esperando y creyendo que algún día, de algún modo podría pasar, en cierta forma me olvide de ese regalo, ese anhelo que al ponerlo en manos de Dios se convirtió en una promesa. Cuando lo pedí y lo escribí también lo guarde en un cajón, sin embargo en lo profundo de mi corazón sabía que algún día llegaría. El tiempo pasó y todavía no se como fue, lo que sí recuerdo es que el día de mi cumpleaños, ajustaba 9 años, cuando llegó a mi recamara mi mamá con una caja muy grande, y dentro, ¡que creen que venía! Pues claro, una muñeca preciosa, muy grande, era casi de mi tamaño, le ponías un disco en la parte de atrás y cantaba " Yo soy tu amiga Graciela, tómame de la mano y caminemos juntas por el parque....." Y también cantaba, "Un elefante se balanceaba..." Y otras canciones más. La verdad mi muñeca Graciela estaba mas bonita de lo que yo pensaba, mi corazón cantaba de alegría y gratitud. Este día sentí que ame más a mi mamá por este regalo. Esa muñeca fue mi compañera y amiga por muchos años más, caminé con ella, la cuidaba, la peinaba, cantábamos juntas, hasta que por fin crecí (bueno un poco ja,ja) y se la pase a mi hermanita menor, pero me hizo tan feliz que todavía la recuerdo. Y hoy me venían todas esas memorias y dentro de mi escuche al Senor decirme: Querida hija, Ese anhelo escrito, desde el día que lo pediste fue escuchado. Fue un deseo que se convirtió en una promesa, fue un regalo que se cumplió porque al paso de todo el tiempo y de todas las circunstancias tú no dejaste de creer, como tampoco dejaste de esperarlo, ya que la esperanza nunca murió, sino que permaneció en tu corazón." Al escuchar ésto en mi interior, supe que no fue de ninguna manera porque yo lo mereciera, o hubiera hecho algo para ganarlo, simplemente fue porque creí a Dios plenamente, tal y como lo haría un niño, pensando que es posible aunque no entiendas el cómo, el cuándo o el porque. Ese dia aprendi que las promesas se obtienen con dos ingredientes de tu parte, la fe y la paciencia. Y que muchas veces aunque las circunstancias te digan lo contrario, si puedes tener grandes anhelos! y los verás cumplidos si pones toda tu confianza en Dios. Como está escrito en Hebreos 6:11-13 "Deseamos, sin embargo, que cada uno de ustedes siga mostrando ese mismo empeño hasta la realización final y completa de su esperanza. No sean perezosos; más bien, imiten a quienes Por su Fe y Paciencia alcanzan las Promesas Y así fue, siendo aún una niña y sin habérmelo propuesto, tuve la fe y la paciencia para esperarlo y entonces, se llegó el día en que la promesa me alcanzó. Dios es fiel a sus promesas. Las promesas se adquieren con dos ingredientes de tu parte, La fe y la paciencia. Cuando pedimos una promesa a Dios conforme a su voluntad que es buena agradable y perfecta, (Romanos 12:12) El nos escucha y empieza a trabajar en ello....
Con Fe y Paciencia se alcanzan las Promesas Él desea que continuemos confiando y esperando en Él. Porque Él es fiel a sus promesas. Como esta escrito en 2 Corintios 1:20 "Todas las promesas que ha hecho Dios son «sí» en Cristo. Así que por medio de Cristo respondemos «amén» para la gloria de Dios." Tenemos que seguir creyendo en su amor y poder y decirle desde el corazón, «amén», creo en ti Señor. Dios nos ama con un amor eterno y del mismo modo que un padre ama a su hijo, por su gran amor desea darnos de sus bondades. Como nos dice el Salmo 118:29 "Den gracias al Señor, porque él es bueno; su gran amor perdura para siempre". Vamos, oremos juntos por esa promesa que sigue anhelando tu corazón,no pierdas la esperanza, Padre bueno, gracias por amarme tanto, gracias por mandar a tu hijo Jesús para salvarme. Perdóname Señor porque a veces he dudado si realmente cumplirás tus promesas en mi vida. Por favor, ¡Ayúdame en mi poca fe! y fortalece mí ser interior espiritual; para que pueda permanecer esperando y confiando que si llegará el cumplimiento de mi promesa. Ven a mí corazón, lléname con tu espíritu y dirige mis pasos por tu camino cada día de mi vida. Te lo pido en el nombre de Jesús, Amén. - Marcos 9:24 Efesios 3:16 - Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey En estos días, tristemente el matrimonio está haciendo muy atacado en todos sus sentidos, se ha llegado a distribuir la idea de que no es tan importante o necesario estar casado, sin embargo, desde el inicio de la creación el matrimonio fue el plan perfecto de Dios creado para vivir en perfecta armonía con tu pareja. Por otro lado, es una realidad que el matrimonio está siendo atacado más constantemente por las tentaciones que provocan a la infidelidad, es decir, las tentaciones en Internet, o aun en la calle. Las tentaciones nunca van a parar, están puestas por el enemigo para coquetear con nuestras debilidades y lograr. Sin embargo, un punto muy importante para evitarlo es volver a darle el valor que tiene a la relación dentro del matrimonio. Es desear de corazón cuidarlo como algo digno de honrar. Es tomar la decisión en tu corazón de evitar todo tipo de tentaciones para ser completamente fiel, con la mirada, con los pensamientos, pero también con el corazón. Es recapacitar sobre lo que realmente es el matrimonio a los ojos de Dios, que fue quien lo diseñó. El matrimonio es la relación ideal donde cada persona tenemos el potencial para desarrollar los dones y talentos que Dios nos dio. Es la única relación donde Dios bendice la intimidad en la pareja. Es donde al paso del tiempo con amor y sabiduría, se va construyendo una relación sólida y podemos sentirnos apreciados, acompañados, respetados y valorados, pero sobretodo amados. Es la relación donde puedes sentirte realmente complementado, ya que tu esposo es la única persona con la que tu entrega es total y te fundes en uno solo. Es el lugar perfecto para tener intimidad, ya que la relación sexual es honrosa y pura dentro del matrimonio y tiene la bendición de Dios. Como está escrito, “Por lo tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne" (Génesis 2:24 RVR1960). Podría decir muchas cosas más sobre el matrimonio, sin embargo, hoy me gustaría que pusieras en práctica un principio, que no importando el lugar donde estés en tu relación, mejorará tu matrimonio. El principio de la siembra y la cosecha en el matrimonio. Permíteme explicarme. Dice en la Palabra que nosotros amamos a Dios porque el nos amó primero. (1 Juan 4:19) Esto me habla que para yo poder amar a Dios; primero El tomó la decisión de amarme. Quiero decir, Dios tomó la decisión de amarnos sin tomar en cuenta nuestros defectos. Porque para El somos valioso, estuvo dispuesto a dar su vida tan sólo por amor. Dios Tomo el Primer paso, Decidió Amarme, Aplicó el principio de la siembra y la cosecha, (Gálatas 6:7) Dios Sembró Amor en mi, y en Consecuencia Ahora yo lo Amo. De igual manera, cuando tú decides dar el primer paso de amar a tu pareja y entregarte, la consecuencia sera que te amara. Porque tu al igual que Dios, decidiste amar primero. Sin embargo, amar no es una palabra hueca. Cuando tomas la decisión de sembrar amor, y amar a tu pareja a pesar de sus defectos. Decides valorarla, honrarla, serle fiel, y empiezas a dar pasos y acciones que muestren amor, entonces vas a cosechar su amor. El reto para la semana sería, Voy a amar primero a mi pareja, voy a mostrarle mi amor a pesar de cualquier defecto o error que vea. Voy a decirle, I Love you Because... Te Amo Porque Deseo Amarte Pon en práctica este valioso principio. Sigue el ejemplo de Jesús y cuando menos te lo esperes estarás recibiendo mas de lo que entregaste. Como esta escrito, “Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo”...Lucas 6:38 (RVR1960) Les amamos y estamos orando por ustedes. Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey. Hace un tiempo Dios me llamó a dar un paso más allá de donde ya estaba, a dejar la zona de confort en cierta área de mi vida, a entregarle más de mi tiempo y esfuerzo, es decir, me llamó a avanzar. Te ha pasado? En parte fue, porque el llamado que Dios dio sobre mí vida se estaba desarrollando y requería mucho más de mi parte (y de mi esposo) ¡El tiene buenos planes para sus hijos! Recuerdo que un preciso día, en el cual me había pedido algo que me parecía muy difícil; me levanté preocupada, y como muchos otros días me aparté para orar en la madrugada. Cuando empecé a orar le dije al Señor, ”Papi amado, hábleme por favor, necesito oír tu voz, siento que es grande la labor que se viene por delante, me pregunto si acaso podré llevarlo a cabo, háblame por favor” empecé a leer su Palabra y en eso dirigió mi mirada hacia el libro de Hebreos 13: 5,( LBA) donde nos dice, "En ningún grado te dejaré indefenso, ni te desampararé, ni te defraudaré ...!" Guau! Dios es maravilloso! sus palabras llegaron a lo profundo de mi alma y me recordaron que no estoy sola, que El está conmigo y El jamás me va a dejar o a defraudar. Lo leí de nuevo y me impresionó como Dios inicia diciendo “en ningún grado te dejaré indefenso”. El me estaba queriendo decir que ni siquiera un poquito me iba a dejar indefensa, me imagino como que Dios Padre está mirándome y ni siquiera por un momento aparta su mirada de mí. Es como si me tuviera rodedada con su Presencia y a cada paso que doy estuviera a mi lado. El recordar esto, trajo de nuevo confianza y paz a mi corazón. Gracias Señor! Querido amigo, quizás te has encontrado en una situación similar, con un reto que muy dentro de ti comprendes que te llevará a avanzar, sin embargo te parece difícil. Sabes, cuando Dios te llama a hacer algo que a tus ojos parece muy grande o quizás imposible, lo más seguro es que el enemigo te va a querer atacar con dudas, incertidumbre o temor, te pondrá pensamientos tales como ”esto es muy difícil, no creo que lo puedas lograr”, ”realmente no tienes a nadie en quien apoyarte”, ”tus capacidades no llegan a tanto”, y finalmente te dirá más fuerte, “¡estás solo!” - Acaso lo has escuchado decir a tu mente algo parecido? Por supuesto que sí, el enemigo es un mentiroso, su naturaleza es mentir, mentir y mentir hasta lograr que creamos sus mentiras. No permitas que esos malos pensamientos se estacionen en tu entendimiento, Más bien recuerda como lo hice yo esa madrugada, que ¡en Dios si puedes confiar! Ante toda duda o preocupación ve a sus pies y platica con Dios. El te ama y desea dirigirte. Pregúntale tus dudas y pídele sabiduría, pero sobretodo pon toda tu confianza en El, dile desde tu corazón lo que dice el Salmista, 73:28 RVR1960 “Pero en cuanto a mí, el acercarme a Dios es el bien;” Dios lo sabe todo. El es digno de confianza, es todopoderoso y jamás te va a dejar, o a defraudar. A veces podemos creer que a El se le olvidó qué tan difícil puede ser lo que nos llamó para hacer, pensamos que Dios no se da cuenta de que nos sentimos incapaces del reto que tenemos por delante, pero no es así, cuando Dios te llama para hacer algo, El te va a habilitar, a guiar y a ayudar en todo lo que tú necesitas.Lo único que él requiere de ti es un corazón dispuesto, como lo decimos siempre en las clases, Dios no busca tu perfección, sino sólo tu disposición. Avanza! Decídete a alejar todo pensamiento que te traiga temor o intranquilidad, y en cambio descansa en El. Avanza! Decídete a confiar en El y a creer en sus promesas, sumérgete en su Palabra, toma la decisión de leerla cada día para que fortalezcas tu hombre interior El va a esperar pacientemente mientras tú te fortaleces leyendo. Así cuando vengan esos pensamientos podrás mantenerte confiando en Dios y le podrás decir sinceramente desde tu corazón, “creo en ti Señor, creo en tus promesas, sé que nunca me dejarás, ni me desamparas” Vamos, oremos juntos, “Padre bueno, hoy vengo a tus pies porque te necesito. Reconozco que me he sentido cansado, agobiado e incapaz de hacer tantas cosas que tengo por hacer. Pero no deseo enfocarme en lo que me afana, sino en lo que realmente es importante, seguirte a ti. Te pido perdón por todos mis pecados y aún por los que no recuerdo. Por favor ven a mi corazón y lléname con tu Santo Espíritu. Me propongo buscarte cada día para escuchar tu voz y que Tú me dirijas. Confío en ti, por eso hoy pongo en ti toda mi confianza para llevar a cabo tu obra. Ayúdame a sentir tu presencia cada día, para no desviarme de tus propósitos, ni alejarme de ti. Te amo, en el nombre de Jesús te lo pido, amén”. Laura G MunozEn mi corazón se agita un bello tema, mientras recito mis versos al Rey. |
AutorCreo que no soy nada especial como para hacer grandes cosas; sin embargo, se que tengo el favor de Dios. Categorias
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